Clemente: "Para mí, ir a San Mamés es un derbi"

Javier Clemente regresa a San Mamés, lo que significa "algo especial" y valora que "para mi jugar ante el Athletic es como un derbi". Según recuerda, "la primera vez que fui me equivocaba de banquillo, hasta que me avisaron" y apuntó que "me gusta ser agradecido con la afición de allí", pero su objetivo es que se vea que el Sporting "es un equipo entrenado por Javi Clemente".

Sobre el encuentro de mañana, el técnico bilbaíno expuso que "vamos a enfrentarnos a un grandísimo equipo", pero subrayó que "vamos con la mentalidad de ganar, como en todos los partidos", aunque admite que el conjunto vasco "es superior en teoría".

Sobre los gritos. En ese aspecto, puntualizó que "eso es lo que dice la clasificación", lo que también expuso en relación con el Mallorca, si bien matizó que el conjunto balear "nos marcó dos goles ridículos, porque el segundo y el tercero no te los pueden marcar". También hizo referencia a que "no entendí que gritaran a los jugadores para pedirles más esfuerzo, porque se dejaron el alma en el campo". Tras saber que los cánticos de censura eran del fondo Sur, subrayó que "soy muy de los ultras, pero insisto en que no lo entendí, porque los chavales corrieron" y agregó que "Gálvez, Trejo y Cases se vaciaron" y añadió que "tuvimos 20 minutos de muy buen fútbol, de lo mejor".

Respecto al encuentro de San Mamés indicó que "va a ser duro, porque el Athletic está jugando la releche" y sus indicaciones son las de jugar "muy centrados en el trabajo y hacerlo bien, pensando en que podemos ganar", pero insistió en que es posible "si acertamos en el trabajo". Clemente valora que el rival es un gran equipo y, según sus referencias, "Llorente va a jugar", pero avisa que "no es sólo un buen rematador, porque tiene otras cosas, sabe parar el balón, va bien con los dos pies, es un jugadorazo, pero el que vaya a marcarlo lo sabe".

Clemente podría repetir once

Javier Clemente hará cambios obligados por las bajas de Cases y Canella, con la entrada previsible de Iván Hernández, quien hasta ahora no entró en juego porque "lleva quince días entrenándose a buen ritmo". Parece que será el encargado de vigilar a Llorente. Orfila volverá al lateral derecho, que es donde mejor se desenvuelve", pero lo utilizó de central porque las necesidades "son las que hay en cada momento". Gálvez podría quedar en el banquillo, si bien el preparador rojiblanco recuerda que "contra el Sevilla y el Granada jugó muy bien, aunque ante el Granada estuvo más flojo". También puede haber un cambio en la delantera, en el caso de que decida sentar a Barral en el banquillo.