Mendes contra Mendes

Empieza a resultar imposible analizar el panorama del fútbol europeo sin acabar en Jorge Mendes. Dentro del extenso campo de influencia del superagente portugués, varios equipos se han convertido en pseudosucursales de su empresa, Gestifute, y dos de ellos, Atlético y Besiktas, se enfrentan en la Europa League. Entre ambos suman catorce clientes de Mendes: seis jugadores rojiblancos y siete futbolistas y el entrenador en el equipo turco, aunque varios son baja hoy. Y, curiosamente, el Besiktas llega a octavos tras eliminar al Sporting de Braga, la nave nodriza de Mendes. Un complejo entramado que es fabuloso para él, pero inquietante para el fútbol.

Precisamente, un cliente de Gestifute, Simao, será protagonista en su regreso al Calderón, donde dejó tres años y medio muy apreciables. Él y su compatriota Quaresma, antiguo objeto del deseo atlético, serán las principales amenazas visitantes ante la ausencia otro portugués: el delantero centro titular, Hugo Almeida. Le suplirá el prometedor Pektemek.

Bajas. Simeone ha instado a Juanfran y Filipe a atacar sin descanso para obligar así a ambos extremos rivales a defender y alejarles del área de Courtois. Por lo demás, el Cholo pone lo que tiene, que empieza a ser poco debido a la plaga de lesiones. Sin Diego, Arda, Tiago ni Sílvio, el centro del campo queda para tres mediocentros (Mario, Gabi y Koke) y el indefinible Salvio. Por fortuna, con la pareja Adrián-Falcao el Atleti tiene pólvora de sobra para darle una necesaria alegría al Calderón. Y a Mendes. O no. A saber.

Simao se reencuentra con la grada del Calderón

Simao regresa hoy a la que fue su casa durante tres cursos y medio. El portugués se marchó de la entidad en enero del año pasado, entre lágrimas y tras haber ganado con la camiseta rojiblanca una Europa League y una Supercopa continental. Llegó procedente del Benfica en la campaña 2007-08 y fue imprescindible para todos los técnicos con los que convivió (Aguirre, Abel y Quique). Con los colchoneros disputó 167 partidos en los que marcó 31 goles. Hoy se reencontrará con la grada del Calderón un año después de su despedida, una grada que siempre le tuvo cariño. En el estadio rojiblanco también habrá 1.500 turcos que se han viajado a Madrid para apoyar a los suyos. Schuster, extécnico de los otomanos, tampoco se quiere perder la cita y estuvo ayer en la sesión del Besiktas.