Liga BBVA | Sevilla 1 - Atlético 1
El efecto Simeone se diluye
El Atlético, pese a mostrar una buena imagen, empató ante el Sevilla y acumula ya cinco jornadas sin ganar. Los de Simeone han sumado tan sólo cuatro de los últimos quince puntos. Salvio adelantó a los colchoneros en la primera mitad y Babá empató devolvió la igualada en la segunda.
Quinto partido consecutivo del Atlético de Madrid sin conocer la victoria. El equipo de Simeone cosechó un empate en el Sánchez Pizjuán ante un Sevilla al que dominó por completo durante la primera mitad. Tras el descanso, los hispalenses reaccionaron y plantaron cara a su rival. Salvio adelantó al conjunto madrileño cuando tan sólo habían transcurrido ocho minutos de partido. Babá, ya en la segunda mitad, se estrenó como goleador sevillista estableciendo el empate definitivo. La reacción experimentada por el Atlético con la llegada de Simeone empieza a diluirse, los rojiblancos han sumado tan sólo cuatro de los últimos quince puntos disputados y seguirá una jornada más fuera de los puestos europeos.
La rivalidad directa por entrar en Europa entre el Sevilla y el Atlético quedó reflejada sobre el terreno de juego desde el pitido inicial. Andaluces y madrileños saltaron al césped con mucho respeto a las cualidades ofensivas de su rival, pero también con la idea fija entre ceja y ceja de buscar la portería rival y desequilibrar el partido lo antes posible. Tras unos primeros compases en los que ambos equipos buscaron asentarse en el campo y hacerse con la posesión del balón, fueron los de Simeone los que comenzaron a dar muestras de peligro. Así, los colchoneros tardaron tan sólo ocho minutos para adelantarse en el marcador con un centro de Gabi desde la izquierda que Salvio mandó a la red de Palop con un cabezazo.
En el guión del Sevilla no entraba encajar un gol con tanta rapidez y los de Míchel, tras recibir el primero, mostraron unos evidentes signos de nerviosismo que bien pudieron costarle el segundo tanto en contra. En esta ocasión, Palop sí acertó a hacerse con el disparo franco desde dentro del área del argentino Salvio. Hubo que esperar al primer cuarto de hora para ver el primer acercamiento peligroso del equipo local. El disparo cruzado de Reyes acabó marchándose desviado junto al palo derecho de Courtois. Con el transcurso de los minutos, Sevilla y Atlético definieron y asumieron sus papeles con claridad: el Atlético esperaba para salir al contragolpe y el Sevilla tocaba para intentar volver a meterse en el encuentro volcando sus ataques por las bandas.
La recta final de la primera mitad sirvió para que Salvio se erigiera de forma clara en el mejor hombre del partido y para que Andrés Palop volviera a demostrar que sus reflejos y su buen hacer bajo palos siguen intactos a pesar de su larga suplencia con Marcelino en el banquillo hispalense. El argentino y el valenciano mantuvieron una pugna particular que acabó decantándose a favor del guardameta, que desbarató con gran solvencia dos nuevas ocasiones del delantero rojiblanco. Un disparo de falta de Reyes, sin excesivo peligro fue, sumado a su desviado disparo en el tramo inicial, el pobre bagaje ofensivo del Sevilla durante una primera mitad en la que se vio superado en todos los aspectos por los hombres de Simeone.
Tras el descanso, el Sevilla estaba obligado a aumentar su creación y, sobre todo, sus llegadas a las inmediaciones de la portería de Courtois. Los de Míchel regresaron al campo obligados a forzar al máximo para abrir el encuentro con la posesión del balón como principal arma. El Atlético, dominador absoluto del primer acto, era consciente de que no debía variar ni un ápice ningún aspecto de su juego, su actitud y su disposición sobre el terreno de juego. El equipo local creó más peligro en los cinco primeros minutos de la segunda mitad que durante los primeros cuarenta y cinco. Una contra sevillista muy bien llevada por Reyes y Navas fue desbarata in extremis por Domínguez cuando el empate parecía estar más cerca que nunca.
Y así fue. Tan sólo tres minutos después, una brillante y medida asistencia de Navas desde la banda derecha sirvió para que Babá devolviera el empate al marcador estrenando su casillero goleador como jugador del Sevilla. Míchel quiso aprovechar el mejor momento de los suyos y el espaldarazo moral del gol para atemorizar todo lo posible a su rival y, acto seguido, retiró a Rakitic y Spahic para dar entrada a Trochowski y Fazio. Con las tablas en el electrónico nació un nuevo partido en el que ambos equipos, uno en efervescencia y otro en decadencia en el envite, se vieron obligados a comenzar de nuevo la conquista de tres puntos que se antojaban vitales para dar un golpe de autoridad en la lucha por los puestos europeos.
Fue el Sevilla el que continuó con el dominio del balón ante un Atlético que daba sensación de peligro cada vez que llegaba a la zona de tres cuartos. A un cuarto de hora para el final, Courtois volvió a demostrar que se encuentra en una vertiginosa línea ascendente con una intervención salvadora tras un cabezazo a bocajarro de Reyes que acertó a despejar evitando el segundo tanto local. La lesión del goleador Babá obligó a Míchel a poner toda la carne en el asador con la entrada al campo de Manu del Moral en sustitución del jugador senegalés. Locales y visitantes buscaron el gol de la victoria hasta el final, pero acabaron firmando un empate que les sirve de muy poco en la lucha por la cuarta plaza.