Liga BBVA | Real Madrid-Racing
El cañón de Cristiano contra el muro de Toño
El Real Madrid recibe al Racing en vísperas de su viaje a Moscú
Para el Madrid, Moscú está a la vuelta de la esquina. Para el Racing, todo es la estepa. Líder flamante contra sufridor veterano. Sobre el papel, el partido ya está escrito. Goleada del Madrid. Quizá un tanto del Racing en los primeros minutos, amabilidad de la casa. Luego reacción y fiesta. Probablemente más cánticos de rechazo a la final de Copa. Pueblo soberano y sabandeño. Mundo feliz (para quien vista de blanco) y el Barça a 13 puntos a falta de su partido de mañana contra el Valencia.
En teoría, el único concurso abierto consiste en adivinar los goles que marcará Cristiano, cuántos y cómo. En apariencia, más que perseguir la Liga, el Madrid va en persecución de la historia, de la comparación con otros equipos formidables y otras delanteras de leyenda. Récords y tonterías, que diría su entrenador.
El partido estaría editado y corregido si no fuera porque el fútbol se rebela ante los pronósticos seguros. No hace falta irse muy lejos. O sí. Una vuelta atrás el Racing fue el último equipo terrenal en robarle puntos al Madrid (0-0). Y hablamos de un Racing peor, más distraído, con menos técnicos (ahora son tres).
Hoy se juega en el Bernabéu, cierto es. Pero también existe la inminencia de una Champions a cara o cruz y de una visita al general invierno, mañana mismo. Cuántas veces hemos visto equipos que, atrapados por el síndrome del excursionista, se han dejado empatar o vencer por tener la cabeza en otro lugar. Cientos. El fútbol les hizo pagar el pronóstico seguro, la certeza.
A eso se agarra el Racing, un equipo que estaría en racha (una derrota en nueve partidos) de no ser porque suma de uno en uno. A esa carambola cósmica y a Toño. A los 32 años, el portero del Racing ha alcanzado una madurez esplendorosa. Sumen su inspiración al debut de Babacar y vislumbrarán la esperanza visitante.
En el Madrid sólo cabe una duda: quién suplirá al sancionado Arbeloa. El quebradero de cabeza que supone su ausencia demuestra la necesidad imperiosa de contratar a otro lateral derecho (la cantera, por ejemplo Carvajal, ni se considera, por lo que se ve). Salvo que el técnico jugara a despistar, Sergio Ramos es quien tiene más opciones. Arriba parece segura la alineación de Benzema, aunque Higuaín se entrenó ayer.
Oirán que la estadística favorece al Madrid, pero es al revés. Juega en favor del meteorito, esa piedra que nos amenaza cada millón de años.