Liga BBVA | Valencia
Éver, otro pibe inmortal
Llegó en 2008 y renueva ahora hasta 2015. Siete temporadas en el Valencia. Ese es el ciclo que quiere cumplir Banega y Manuel Llorente espera que así sea. Si lo hiciera, Banega se quedaría a un curso de Óscar Rubén Valdez, el argentino que durante más años ha defendido a los ché.
Veinte son los argentinos que han pasado por el Valencia a lo largo de su historia. De entre todos ellos, Valdés es quien más temporadas militó en la entidad, ocho, seguido por Kempes y Ayala, siete cada uno. Y a estos dos últimos igualará Ever Banega si cumple el contrato que acaba de firmar hasta 2015. Y por su edad, 24 años, tiene a su alcance convertirse en el pibe más inmortal, cuanto menos longevo. Porque no cuenta Jesús Martínez (nueve años) dado que para él uno es de donde nace y no de donde pace y vino al mundo en Lugo.
Ever Banega, que llegó en diciembre de 2008 (aunque militó un año cedido en el Atlético de Madrid), se mostró "orgulloso" por haber alcanzado un acuerdo que "tanto lo esperaba". Parece que fue ayer, aunque como le recordaban en una pregunta durante el acto, Banega ha visto pasar en este tiempo hasta cinco presidentes, otros tantos directores deportivos, tres entrenadores... Por no hablar de los altibajos que ha tenido en cuanto a su popularidad y regularidad. En apenas seis meses ha pasado de tener pie y medio fuera del equipo (así se lo hicieron saber incluso a Parejo cuando le ficharon) a ofrecerle dos años más de lo que le restaba de contrato "y si juega como lo está haciendo ahora, continuará hasta que él quiera con nosotros", aventuraba un Manuel Llorente que explicaba con esta frase el por qué ahora a Banega se le renueva cuando en verano se le iba a traspasar: "Ha evolucionado futbolística y humanamente... como persona es de lo mejor que he visto aquí en el Valencia".
La renovación de Banega se ha hecho en tiempo y forma acorde a la coyuntura. Es decir, firma antes de que iniciara su último año de contrato y lo hace por unos emolumentos acorde a su rol, aunque también a los tiempos de crisis que corren. La cláusula de rescisión se mantiene en 30 millones y el propio Llorente quiso aclarar que no se le renueva para tener la sartén cogida por el mango de cara a una futura venta sino para "que se quede muchos años con nosotros".
"Hemos tomado decisiones impopulares por la situación que hemos vivido. Queda mucho camino que recorrer pero esperemos, queremos, que los jugadores importantes como Banega se queden para que este equipo se haga cada vez más grande". Y eso espera el argentino: "Quiero ganar algún título más".