Segunda B
El Poli Ejido 2012 SD resucita al antiguo Poli
En tiempos de crisis muchos clubes de Segunda B están abocados a la desaparición y buscan soluciones a la desesperada. Algunos como el Poli Ejido se han refundado con otro nombre e intentan seguir vivos en la competición. Otros correrán peor suerte, ya que las deudas les ahogan.
El Polideportivo Ejido, que tras 43 años de historia milita en el Grupo IV de Segunda B, se debate entre la vida y la desaparición después de haber liderado el deporte almeriense en el inicio del siglo XXI. Para salvarse de la extinción, y a sabiendas de que la Ley Concursal lo ha amparado durante las dos últimas temporadas, ha realizado una estratagema legal para desvincularse de la antigua sociedad, que adeudaba más de 3 millones de euros. Para ello ha creado una nueva llamada Poli Ejido 2012 Sociedad Deportiva, cuya cabeza visible es el empresario balear Manuel Amer. El nuevo dueño trata de mantener al equipo vivo en la categoría de bronce, ya que tan sólo conserva a tres jugadores tras haber perdido al resto con la carta de libertad por impagos.
La historia del Poli Ejido está plagada de éxitos que nunca llegaron a completarse. En tiempos de bonanza económica, el club representó el mayor estado de bienestar de los equipos de fútbol de la provincia almeriense. En 2001 ascendió a Segunda con el único objetivo de dar el salto a Primera. Las plantillas del conjunto celeste mejoraban de temporada en temporada y cualquier futbolista quería fichar por el Poli Ejido: pagaba bien y siempre tenía objetivos elevados. Sin embargo, en la campaña 07-08, el sueño comenzó a deshacerse. El Poli entrenado por Castro Santos firmaba su descenso ante el Albacete y se metía en el pozo de la Segunda B. Desde entonces, casi todo han sido malas noticias.
Crisis. La localidad del Ejido entró en decadencia económica en 2009 y eso se dejó notar en el resto de actividades de la ciudad, sin que se pudiera escapar el terreno deportivo. Los jugadores dejaron de cobrar a tiempo y muchos comenzaron a rebelarse. Algunos decidieron marcharse a tiempo y otros continuaron a la espera de cobrar la totalidad de lo que se les debía. La situación se sostuvo a medias hasta junio de 2011, cuando por impagos a los jugadores, la AFE anunció que el club debía bajar a Tercera.
Sin embargo, toda SAD que se encuentre en un concurso de acreedores, caso del Poli Ejido, depende de la decisión del Juzgado de lo Mercantil, quien permitió al equipo continuar en la categoría. Así que permaneció en Segunda B hasta la actualidad, un momento en el que, tras desbandada de la mayoría de la plantilla, la nueva directiva, con tres jugadores, trata de formar una nueva. Debería haber sido presentada ayer, aunque el acto se suspendió a última hora.
No pudo jugar la pasada jornada
Dani Cara, Borja Cantarutti y David Fernández son en la actualidad los tres únicos jugadores del Polideportivo Ejido. Ayer estaba previsto que el club presentara a un puñado más, pero el acto tuvo que ser aplazado por causas que se desconocen. La escasez de jugadores impidió al conjunto celeste jugar el pasado fin de semana ante el Villanovense por no tener a siete jugadores del primer equipo, ya que el resto pertenecían a las categorías inferiores.
Se puso en venta y nadie lo quiso
El pasado 27 de diciembre, el que quisiera haber adquirido al Polideportivo Ejido lo podía haber hecho por una módica cantidad, pues se subastaba. Los administradores concursales solicitaron a quienes hubieran conseguido la consigna de 3.000 euros necesarias para comprarlo que pasaran a la sala para negociar, pero nadie respondió a la llamada. La subasta se quedó desierta y es que asumir los tres millones de deuda era una carga demasiado pesada.