Guaita se planta y no quiere ir citado hasta estar a tope

La situación que vive Vicente Guaita es insostenible. El guardameta de Torrent no entrena con normalidad con el primer equipo desde hace un mes, pero en cambio está siendo convocado por los técnicos como suplente de Diego Alves en las últimas semanas. Esto ya ha sucedido tanto en la Copa como en la Liga e, incluso, se tuvo que poner los guantes ante el Cádiz, para jugar lesionado.

Pero esta situación es muy peligrosa porque Guaita siente que no está preparado ahora para defender la portería del Valencia, ya que lleva sin trabajar desde hace cuatro semanas a pleno rendimiento. Y es que, no ha hecho trabajo específico de portería en este último mes y eso para los porteros es un hándicap tremendo porque pierden referencias bajo palos e incluso agilidad y confianza. De hecho, varios preparadores y técnicos específicos de porteros indicaron a AS que los parones en una temporada los jugadores que más lo notan son los guardametas.

Además, el meta sigue sin entender qué hace en el banquillo todas las semanas sin poder recuperarse al 100% de su lesión. Guaita está haciendo un sobreesfuerzo tremendo por complacer las voluntades de Emery, ya que el vasco no se fía demasiado de los metas del filial ni del juvenil. Y pese a tener un edema óseo en la base del tercer metacarpiano ha ido convocado (incluso ha jugado) sin rechistar en los meses de noviembre, diciembre y enero.

El joven meta sigue callado, sin levantar la voz, pero la situación ha llegado a tal límite que no puede más. El dolor no remite, ha visitado varios especialistas de la medicina y el de Torrent quiere parar definitivamente porque sabe que está jugando con su salud y no quiere que de un problema menor, se convierta en una lesión crónica que le impida en el futuro volver a tener buenas sensaciones. Las lesiones se pueden agravar y ejemplos en el Valencia hay varios: Claramunt, Vicente, étc.

Los médicos chés ya saben que no se va a infiltrar más

Guaita ya le ha comunicado a los doctores chés que no se va a volver a pinchar para infiltrarse hasta que se recupere de la lesión de su mano. No quiere ni ver una aguja las próximas tres o cuatro semanas que aún le restan de su recuperación. Sí porque va a tener que estar parado cerca de 25 días más, y si se esperaba su vuelta para la primera semana de febrero, parece que su regreso será para el Camp Nou (19 de febrero). Se acabaron las infiltraciones.