Anoeta vive unos octavos de Copa 12 años después

Doce años. Ese es el tiempo que Anoeta y la afición de la Real llevan sin paladear una eliminatoria de octavos en la Copa. Desde aquel duelo ante el Atlético de Madrid de la temporada 98/99 no se ha vuelto a ver a los txuri-urdines por la zona noble de la competición copera. Sin duda épocas de penuria, de sonrojo, en un torneo ilusionante por naturaleza y al que los donostiarras se agarran de nuevo con fuerza en la actual edición.

Montanier deberá certificar esto manteniendo la mejoría que protagonizó su equipo en los últimos partidos de 2011. Para ello podría optar por Llorente en lugar de Agirretxe -que acaba de renovar hasta 2015- en la punta de su ataque, aunque el entrenador galo sorprendió ayer al dejar fuera de la convocatoria a Ifrán y el tocado Íñigo Martínez. Pese a airear lo contrario, algunas de sus decisiones chocan frontalmente con los propósitos de afición y club con respecto a la Copa.

Pero los donostiarras no son los únicos esperanzados con esta competición. El Mallorca de Caparrós se ha movido con soltura en los últimos años y esta es una nueva ocasión para brillar. Aún así, el técnico alineará un equipo plagado de caras nuevas, jugadores con menos ritmo pero quizá más motivación. Probablemente lo que busque el utrerano.

Lesión. Quien no debutará será el delantero Ogunjimi, primer fichaje bermellón en el mercado invernal y al que un esguince de tobillo le hará guardar reposo en Palma. Una pena, porque las referencias que llegan del ariete nigeriano con pasaporte belga son fantásticas. Así, el israelí Hemed y el joven Álvaro Giménez serán los encargados de buscar el gol con el que sentenciar la eliminatoria en la vuelta.