Euskadi jugó para ganar, pero Túnez hizo diana

Túnez soportó la avalancha de la selección vasca en La Catedral, que le chutó veinte veces a puerta sin acertar, y aprovechó un par de llegadas en la segunda parte para llevarse un triunfo alucinante. No hubo manera de batir a los dos porteros africanos, que cuando eran superados tenían la ayuda de un compañero bajo la raya. Resultado frío en un ambiente caliente, con una exhibición de material protécnico en la grada que no vino a cuento. El equipo del debutante Amorrortu jugó de largo para ganar, pero su atascada puntería y un adversario que no se arrodilló lo pusieron imposible.

La Euskal Selekzioa llevó el timón del juego durante todo el partido, aunque curiosamente fue mucho más incisiva en ataque en la segunda parte, en la que encajó los dos goles. Los africanos se mantuvieron de pie a pesar de las embestidas iniciales de una banda derecha de lujo, Iraola-Xabi Prieto, y del posterior empeño de Toquero, Susaeta y Barkero.

Aduriz, con un remate de chilena y un derechazo repelido por el meta, y Zurutuza (demasiado individualista), con un cabezazo sacado en la raya por un defensa, estuvieron a punto de adelantar a la tricolor. Los hombres de Trabelsi apenas inquietaban a Iraizoz en una acción del habilidoso Chehoudi. La llamada al descanso incrementó la carga local.

Cuando más claro parecía el triunfo de la Euskal Selekzioa, con ocasiones de San José, Susaeta e Iturraspe, llegó el mazazo africano. Una acción del recién incorporado Chermiti, que lanzó al poste un balón que desvió como pudo San José, permitió a M'Sakni Youssef marcar a puerta vacía. Y luego Chadly hizo el 0-2 tras una jugada confusa. El madridista Xabi Alonso, que fue aplaudido, jugó media hora a buen ritmo y rozó el gol en un lanzamiento lejano de falta.

¡Aduriz, quédate!

Uno de los que más ganas de agradar puso fue el valencianista Aritz Aduriz, a quien la afición del Athletic quiere de vuelta. Sonó el cántico de ¡Aduriz quédate! y el guipuzcoano se marchó aplaudiendo con efusividad a sus seguidores después de mandar fuera por poco un cabezazo de postal.

Dio paso al realista Agirretxe, el futuro ariete titular de la tricolor, quien también gozó de una clara ocasión con un zurdazo. Toquero, aclamado como un héroe, ponía la quinta marcha, pero no había forma de marcar. Recordó en cierta manera a los apuros que tiene el Athletic de Bielsa como local. Quizás haya que pintar las mallas de las porterías.

Fue una bonita noche para los debutantes como Beñat, quien tuvo que lidiar como lateral derecho tras los problemas físicos de Carlos Martínez, Íñigo Martínez, Mikel Rico y Aurtenetxe. La afición se lo pasó bien animando, la derrota apenas dolió.

El detalle: petardos y bengalas

El intento de la Federación Vasca de Fútbol de que los malos modos se dejasen en casa sólo funcionó a la hora de impedir invasiones. El gran ambiente en San Mamés fue enturbiado por el lanzamiento de petardos y bengalas hasta jugarse los primeros minutos bajo una humareda desagradable. Iturralde detuvo el juego en la primera mitad para retirar una bengala.