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Liga BBVA | Málaga-Villarreal

Cazorla: el reencuentro

El asturiano contra sus ex. Partido 100 de Garrido

Cazorla: el reencuentro
mariano pozo

Resulta muy llamativo lo poco que se parecen Málaga y Villarreal. Ciudades distintas y realidades diferentes. Y, sin embargo tienen empatía. El desembarco económico del sheikh Abdullah bin Nasser Al-Thani tiene como primera premisa que su inversión sea rentable. Y para serlo a medio plazo, debe parecerse a su rival de esta noche en cuanto a fútbol, filosofía y el sueño de que su futura Academia promocione talentos tan brillantes como en su día sucedió con el hoy malaguista Santi Cazorla.

El asturiano protagonizó el traspaso del verano. Pocas veces un club de fútbol (no sólo español, también europeo) se atrevió a comprar a un futbolista pagando al contado 19 millones de euros. Pero sucedió. Hoy Cazorla se reencuentra con amigos a quienes, sólo durante 90 minutos, espera amargar el viaje. Eso sí. Ya ha dicho que si marca un gol no lo va a celebrar "por el respeto y el cariño que siento por ese club y esa afición".

Y hoy será un día especial para Juan Carlos Garrido que sumará su partido número 100 en Primera División. Quien más quien menos pensaba que, cuando se estrenó entre los grandes un 7 de febrero de 2010 (derrota 1-0 contra el Mallorca), el valenciano sería un parche mientras el dueto Roig-Llaneza buscaba un mediático que llenase el vacío dejado por el hoy malaguista Pellegrini cuando voló al Real Madrid. Para nada. Garrido tiene hambre, talento, garra y el espíritu de una entidad que lleva una década jugando una competición europea que esta vez se le ha atravesado. Bayern Munich, Manchester City y Nápoles, 'el grupo de la muerte' fueron demasiada tela. En el día del reencuentro de Cazorla veremos también si el Málaga, quinto en la tabla, perfecciona su, a día de hoy, cuestionado fútbol. Se le pide mucho más. Normal.

Desencuentro por tres millones aún pendientes

Las relaciones entre el Málaga y el Villarreal no se pueden decir que sean malas. Pero anduvieron en una fase de cierta frialdad. El Málaga abonó al contado 19 millones de euros por Cazorla. Pero quedaban pendientes de satisfacer tres millones más de euros en concepto de IVA.El Málaga ofreció todo tipo de garantías, aceptadas por el club de Fernando Roig. Todo quedaba pendiente de una transferencia que debía llegar de Catar. Sabido es que este tipo de asuntos bancarios suelen ser farragosos, pero eso no implica incumplimiento. "Todo se va a solucionar", aseguraban desde el Málaga.