El 'general' Anibal reta a la tropa de D'Alessandro

Ni los más optimistas esperaban que el Nàstic presentase un bagaje tan bueno con el cambio de entrenador: dos victorias, seis goles y la portería a cero. Pero los buenos números no maquillan una realidad que D'Alessandro se ha encargado de repetir desde que acabara el partido ante el Sabadell: el equipo sigue en puestos de descenso, y tan sólo se ha puesto la primera piedra en el arduo camino hacia la salvación.

Pero la realidad también muestra su cara amable y el Nàstic está consolidando un estilo de juego sólido, reconocible y en el que sus jugadores se sienten cómodos. Los goles de Powel son buena muestra de ello, pero también las asistencias de Morán y Longás, dos jugadores "recuperados" por D'Alessandro. La necesidad de una victoria ya no es imperiosa, pero lograr la tercera consecutiva llenaría de ánimo al Nàstic y, de paso, sacaría al equipo de la zona de descenso.

Rival herido.

Enfrente estará un Guadalajara que se quiere quitar una espina que lleva clavada desde su visita al Mini, última victoria lograda en la jornada nueve. Pero la imagen mostrada por el Guadalajara en el último partido ante el Alcoyano fue sustancialmente mejor, y hay optimismo en conseguir la victoria. El balance defensivo, mayor defecto del Guadalajara esta temporada, ha mejorado en los últimos partidos, y tendrá la difícil tarea de frenar a un Nàstic en racha y particularmente a un Powel que está mejor que nunca.