Dátolo vuelve: "El penalti no es ni aquí ni en China"

Fue el último en abandonar ayer la Ciudad Deportiva, en una mañana en la que el sol y la llovizna no se quisieron perder el regreso al trabajo de la plantilla. Jesús Dátolo debutó como titular esta temporada el domingo en La Rosaleda, después de haber superado lesiones y ausencias por decisión del entrenador. El argentino reconoce a AS que no lo pasó mal en ese periodo y que ese tiempo de barbecho le ha servido para madurar. "Esa situación que viví me ha fortalecido. Tuve un toque de atención y eso te hace pensar en todo. En aquel momento no estaba considerado. Hay que hacer autocrítica, porque si uno no juega es porque algo no está haciendo bien", comenta, sincero, antes de esperar que esa oportunidad sea el principio de una buena racha personal. "Estoy muy contento de haber jugado, no del resultado. Tuve la posibilidad de jugar y así podré acercarme más a mi verdadero nivel. Quiero tener más minutos".

Dátolo fue uno de los espectadores que vio en primera fila el penalti (que no fue) de Cristian Romaric. El extremo aún alucina. "En la jugada del penalti estaba de costado. Viéndolo por televisión, uno se da cuenta de que eso no es penalti ni aquí ni en la China", lanza. Pese a la derrota, Dátolo cree que la buena onda perica no tiene por qué detenerse. "Este tipo de derrotas te fortalecen, porque el equipo tiene fastidio por el partido y estamos muy motivados para volver a ganar y sacar toda la rabia que tenemos en el interior. Queremos jugar ya".

Precisamente, Dátolo -quien ya había participado en tres de los cuatro últimos encuentros- también quiso mojarse sobre las dos caras que se le han visto al Espanyol sobre el campo: con falsos extremos y con extremos puros. "Si el técnico considera que es mejor desarrollar ese planteamiento será por algo. Hay que apoyarlo, porque seguro que es acertado. Tomó la decisión de poner a Verdú en la izquierda, y está bien, porque ha acertado en muchas decisiones". Al mismo tiempo, considera que un jugador como él, o sea, con desborde, es indispensable: "A veces el jugador desequilibrante suma. Tener jugadores así es imprescindible. El regate y el centro son buenos para el delantero".