Liga BBVA | Sporting 2 - Granada 0
Traspaso de la presión
Preciado cede la incertidumbre del cese a Fabri
El acierto resultó decisivo. El Sporting aprovechó dos de la docena de veces que llegó a los dominios de Roberto, mientras que el Granada se encontró con la madera, Juan Pablo, la zaga local y el punto de mira desviado de cara a la portería rival. Los gijoneses logran el primer triunfo de la temporada, con el que se traspasa la presión de destitución que tenía el técnico local Preciado a Fabri, que en la tarde de ayer era el entrenador visitante.
La salida del Sporting fue impactante, con un asedio a la portería de Roberto, quien ya se lució a los veinte segundos en un remate del gaditano Barral. Sin embargo, no pudo evitar el disparo del gaditano, con engaño a su poste, que empezó a encauzar el encuentro para los jugadores locales a los cinco minutos del inicio del choque.
La lesión de Yedba cambió al Granada, ya que con la entrada de Mikel Rico ganó en presencia en el centro del campo en equipo visitante. Sin embargo, la agresividad de los locales daba una mayor posesión del juego a los sportinguistas. Sin embargo, a medida que pasaba el tiempo, el Granada se estiraba, bien secundado por Fran Rico y con presencia por las bandas, para buscar servicios a los delanteros más específicos. Pudo marcar Geijo, quien tiró a un poste, y Benítez, a quien Juan Pablo le tomó la medida durante todo el encuentro y repelió todos los intentos del jugador granadino.
El Sporting, al contraataque, creó algún problema, pero con demasiada confianza en su juego, al dar prioridad a la contención, a la espera de alguna acción afortunada, que llegó al filo del descanso, en un mal entendimiento entre Roberto y Mainz, que aprovechó André Castro. En la réplica, Uche no supo definir. Y así se llegó al descanso con la cómoda ventaja gijonesa.
En el segundo tiempo mandó el Granada. Los visitantes empujaron mucho por las bandas, al adelantar Fabri la presencia de los laterales, lo que creó complicaciones al conjunto de Preciado. Los andaluces abusaron de colgar balones, lo que le venía bien al potente central Gregory y a un insuperable Iván Hernández, bien respaldados por Juan Pablo.
Con la entrada de Jara, el Granada ganó en poderío ofensivo, pero el gran problema de los andaluces es que no definen cuando se plantan ante la portería rival. Hasta ahora no saben lo que es marcar fuera de Los Cármenes y la explicación la demostraron en El Molinón en el encuentrode la tarde de ayer.
El partido estuvo emocionante, pese a la diferencia de dos goles en el marcador, con un tiempo para cada equipo. La puntería resultó clave para decidir un vencedor de la contienda de El Molinón. El Sporting tuvo más premio, sobre todo por su arranque que consiguió materializar en dos goles.