La vuelta de Morán fue la mejor noticia

Recibió el balón de espaldas a portería, cubierto, y sin girar la vista atrás cedió de tacón el cuero a Sergio Juste para que habilitara a Powel y éste marcara el 1-2 en Riazor. Fernando Morán regresó al equipo y lo hizo por la puerta grande, disfrazado de Valerón, y dando la razón a Joan Carles Oliva, quien lleva semanas advirtiendo de que con la vuelta de los jugadores lesionados el rendimiento del equipo mejoraría notablemente. El partido del Nàstic ante el Depor, quizás el mejor del año, tuvo en el regreso de Morán, y también de Tuni, la mejor noticia para el Nàstic. El punto conseguido es vital, pero la mejoría en el juego, la imagen y la mentalidad del equipo es un botín que va mucho más allá de un solo encuentro. El equipo demostró que, con la plantilla al cien por cien, tiene fútbol de sobra para no sufrir. Pero además de la recuperación de Morán y de Tuni, el seguidor grana tiene más motivos para ser optimista. Powel volvió a demostrar lo que es, un depredador del área, y ya firma cinco goles esta campaña, a uno de Joselu, pichichi de la categoría. Cosa que también tiene su lado negativo, ya que el holandés es el único jugador del Nàstic que ha conseguido marcar en los siete partidos que llevamos ya que el gol restante, fue en propia puerta.