Trivote y Aganzo para sobrevivir en Guadalajara

Cuatro metros. Ésta es la cifra que trae de cabeza a Juan Carlos Mandiá desde hace días. Al gallego no le quita el sueño la posibilidad de llegar a la hora de la comida con el liderato bajo el brazo, ni la ausencia de Abel Aguilar, ni el papel revelación que ha cogido el Guadalajara, ni jugar con un trivote... A Mandiá sólo le preocupan las dimensiones del Pedro Escartín. El técnico del Hércules teme una encerrona. Le inquieta que el estadio alcarreño se convierta en una ratonera. Por eso, ha denunciado públicamente que el Pedro Escartín es cuatro metros más corto que el Rico Pérez. No es una excusa, pero sí un aviso por si el partido es feo y hay que tirar de oficio.

Para acoplarse cuanto antes a las medidas reducidas, Mandiá va a poblar su centro del campo. Quiere contrarrestar el juego del Guadalajara con Diego Rivas, Escassi y Tiago. La ausencia de Abel es importante y el gallego la compensará con un trivote. Tiago se multiplicará para achicar agua en la zona ancha y darle oxígeno a Aganzo en los últimos metros. El portugués es vital y vuelve al once para demostrar sus galones.

El Guadalajara bajó de la nube la semana pasada. Perdió su condición de invicto en Riazor, pero hasta ese tropiezo su hoja de servicios estaba inmaculada. Sobre todo, en casa, donde sólo ha cedido un empate hasta el momento. Terrazas cuenta con la ilusión del novato y la calidad de Ernesto y Aníbal. Mandiá ya sabe lo que le espera y una semana más volverá a apostar por David Aganzo desde el principio. El madrileño aún no está a tope, pero una gota de su clase puede servir para salvar la papeleta. Ya sea como killer o como fino estilista. Así se ganó al Alcorcón la semana pasada.

El Hércules no sólo va a acumular músculo en el centro del campo. El desborde y la chispa la tienen que poner Carlos Calvo y Míchel, que abandonará la mediapunta para caer a la banda izquierda. Pero si al final hay acoso por parte del Guadalajara, Mandiá también está tranquilo. Eso sí, tendrá que encomendarse a Falcón, su ángel de la guarda.

Mora trabajó ayer al margen y será duda hasta el último instante

El Hércules se entrenó ayer en Torrejón del Rey (Guadalajara) y todas las miradas estuvieron puestas en Pepe Mora. El central sigue siendo duda para el partido de esta mañana. Su participación se decidirá en el último instante, ya que arrastra unas molestias en los isquios desde el pasado choque ante el Alcorcón. Mora realizó ayer unos ejercicios específicos, pero fueron insuficientes para desvelar su participación. Si Mora no se levanta con buenas sensaciones, Sergio Alejandro Díaz le sustituirá en el eje de la zaga. El central asturiano apunta a la titularidad y podría jugar junto a Samuel. Si finalmente es titular, Sergio se estrenaría en Liga. Otra opción que maneja Mandiá es apostar por Arbilla. No obstante, el gallego centrará sus esfuerzos en recuperar a Mora.