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Roberto Jiménez

"No sé nada de fondos, yo entiendo de guantes"

Es el héroe de un, por ahora, débil Zaragoza y el portero que más para de la Liga, pero mezcla su alegría con cierta cautela y con sentimiento colectivo: "Ojalá hubiera sido al revés: poco trabajo y dos victorias". El estruendo de su fichaje se compensa: "Puede que mi destino fuera volver".

Jorge Solans
Roberto Jiménez.

Como los súper héroes con sus trajes, Roberto adquiere un nivel excepcional con la camiseta del Zaragoza. ¿Cuál es el secreto?

(Risas) Es verdad que me siento muy a gusto defendiendo estos colores, la confianza que tengo aquí es muy importante y la gente de alrededor me la transmite.

Nunca sintió tanta confianza en el Atlético, ¿verdad?

Siempre me he considerado un jugador con confianza y he creído en mí, pero nunca había recibido tanto el cariño de una ciudad y una afición, así como en la plantilla y en el club.

Salió del Zaragoza como un héroe y pronto se hizo villano en el Benfica. ¿Por qué?

Hay muchas cosas que los jugadores no podemos controlar. Llegué allí por debajo de un estado óptimo de forma y, sumado a la cantidad de dinero que se pagó por mí, hizo que enseguida estuviera en el punto de mira.

En su presentación, hace un mes, dijo: "Esto debía haber pasado hace un año". ¿Se arrepintió de ir al Benfica? ¿Le impulsaron los euros y el Atlético?

Un jugador siempre decide dónde quiere ir. Se me presentó una buena oportunidad de jugar en Europa y luchar por títulos. No me arrepiento, pero mi primera opción cuando dejé el Zaragoza era volver y quedarme. Se me plantearon una serie de cuestiones en el Atlético respecto a mi futuro en la plantilla y que tenían una buen oferta del Benfica, así que decidí irme muy contento al Benfica. Pero sí puede ser que mi destino pasara por volver a Zaragoza...

¿Afecta el estruendo de las cifras de su fichaje y la fórmula del fondo de inversión?

No sé nada de fondos, yo sólo entiendo de guantes. Si alguien quiere hablar de ello, yo le recomiendo (risas).

Es el líder de paradas de la Liga: 20. Son muchas en sólo dos partidos, ¿no?

Quizá es algo anecdótico, no hay que darle mucha importancia. En ambos partidos hemos tenido mucho trabajo defensivo y he tenido que intervenir mucho. Pero ojalá hubiera sido al revés: poco trabajo y dos victorias. Si tiene que ser así, intentaremos seguir haciendo un trabajo bueno como equipo. Ahora me toca ser el protagonista, sobre todo por el penalti, pero quiero destacar el trabajo colectivo como clave para puntuar en Vallecas. Ojalá no tenga que hacer más paradas porque eso significa que el equipo funciona muy bien tanto en ataque como en defensa.

¿La gloria de un portero siempre va precedida de la debilidad de su equipo?

El mejor portero es el que interviene poco pero interviene bien. Por eso se valora a los mejores porteros en los mejores equipos. Lo poco que reciben de trabajo lo hacen bien.

¿Sus compañeros le han invitado a unas cañas?

Igual de agradecido que estoy yo a ellos por el trabajo que hicieron. Cada día tiene uno el protagonismo. Nadie consigue las cosas solo, en este equipo confiamos en todos los jugadores.

¿Recuerda algún comentario o anécdota concretos?

Nada en particular. Lo que más valoro es el apoyo de Leo (Franco), es un compañero fenomenal y un profesional ejemplar, como ya sabíamos. Es el primero en venir y en felicitarme por el partido. Los porteros lo valoramos mucho y es fundamental para que haya una buena dinámica en el equipo.

¿Qué hace o piensa desde que el árbitro pita penalti hasta que se lanza?

No soy mucho de protestar, una vez pitado no hay nada que hacer. Intento centrarme. Son jugadas más del fútbol, que todos hemos vivido. Simplemente hay que intuir o pensar para adivinar.

¿Conocer a Javi Fuego fue la clave de la parada?

Lo conocía, pero eso puede ser un arma de doble filo, quizá sea más una batalla psicológica que un acierto físico. Son una lotería, tampoco hay que darle mayor importancia. Salvo grandes porteros que a lo largo de la historia se han caracterizado por parar muchos penaltis, con porcentajes de acierto de hasta el 80%.

Pero en el Zaragoza ha parado dos de tres, son muy buenos números.

En el Zaragoza se ha dado así y estoy contento, pero ojalá no nos piten ninguno más en toda la Liga.

¿Qué le dijo Javi?

No hablé con él del penalti. Al final, nos saludamos y nos deseamos suerte.

Al margen del penalti, ¿cuál de las otras 19 paradas recuerda como la más difícil?

Cada una te llega en un momento diferente de cada partido y tiene su valor. Quizá la última con Delibasic, por el tiempo del partido y la necesidad de puntuar, por ser la última, sea la que mejor recuerdo y la que más valoro.

¿Recuerda algún error?

Algún error o cosas por mejorar tenemos todos. Son aspectos técnicos que tienes en un momento dado y que entonces lo sabes. Ahora quizá no me acuerdo, pero si lo analizas con el video seguramente saldrán.

Quizá, un centro del Rayo, al final, al que no salió y Michu remató en el área pequeña.

Es posible, no lo recuerdo bien. En ese momento pude no verlo claro y aguanté, pero quizá no fue la mejor elección.

¡Quería picarle un poco!

(Risas) Está bien, estoy recibiendo muchas flores estos días y hay que mantener los pies en el suelo. Luego, en algún momento, llegarán los errores y los palos serán mucho más duros. Hay que mantener un equilibrio.

Enhorabuena, siga así.

Muchas gracias, ojalá.