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España prueba con Llorente en punta y Albiol-Busquets
Vicente Del Bosque perfila un equipo titular con algunos cambios para recibir a Liechtenstein en Logroño, donde las entradas llevan casi una semana agotadas y la expectación es máxima.
España vuelve a Logroño, donde no juega desde octubre de 2002 (0-0 ante Paraguay). De aquel equipo que dirigía Iñaki Sáez queda Xavi pero en realidad apenas queda nada. España llega esta vez a Logroño, donde hay hambre de fútbol de primer nivel, como campeona de todo, de Europa y del mundo. El partido debería servir además, y salvo sorpresa mayúscula, para que España certifique su clasificación para la próxima Eurocopa, donde defenderá corona.
Del Bosque trabaja con la idea de introducir cambios con respecto al equipo que decepcionó primero y remontó después en el amistoso ante Chile del pasado viernes. Del 'once' se caerán seguro Negredo y Villa y Javi Martínez tiene papeletas para empezar en el banquillo. Si finalmente juega lo hará como centrocampista y no como central. Para ese eje de la defensa que está dando quebraderos de cabeza sin Puyol y sin Piqué, Del Bosque piensa en Albiol y Busquets, que completarían la defensa junto a Ramos y Arbeloa, con Casillas de portero y Llorente, en su tierra, como referencia en ataque.
En el centro del campo las cábalas son mayores. Con Pedro y Silva en las bandas, una opción es jugar con Xabi Alonso de ancla e Iniesta y Cesc o Xavi por delante y la otra es no renunciar al doble pivote y situar a Javi Martínez junto a Xabi.
Máxima expectación en Logroño
Logroño, mientras, vive con ilusión desbordada el regreso de España y el regreso del fútbol de máximo nivel a un estadio que, desde su inauguración en febrero de 2002, no ha dado demasiada fuerte al inestable Logroñés, que ha pasado entre zozobras y transformaciones del histórico Club Deportivo que jugó en Primera a la actual Unión Deportiva que busca el ascenso a Segunda.
Las 17.130 localidades están agotadas desde el pasado martes, cuando todo el papel se vendió en menos de nueve horas. Algunos de los afortunados hicieron colas de casi 20 horas y los que se quedaron sin entradas podrán ver el partido en la pantalla gigante situada en una zona de carpas habilitada por el Ayuntamiento para organizar actividades relacionadas con el partido.
En la llegada al aeropuerto de Agoncillo de la expedición española, más de 400 personas esperan con cánticos y ovaciones, las mayores para Fernando Llorente, que vuelve a su tierra como campeón del mundo. Logroño, sin plazas hoteleras por la coincidencia de este partido y de la vuelta a España, tiene ganas de 'Roja'.