Comienza la revolución Camacho

Con ilusión y optimismo". Así encara José Antonio Camacho su debut hoy en el banquillo de China. El entrenador español aspira a iniciar la revolución en el fútbol chino y su objetivo es conseguir que los chinos inicien el camino para ser una potencia también en el deporte rey. China arranca hoy la fase de clasificación para estar presente en el Mundial de Brasil 2014.

Expectación.

La llegada de Camacho ha provocado gran expectación entre los aficionados chinos, que han recuperado la ilusión. Se espera un lleno en el estadio de Kunming. En medio mes en China, Camacho y su equipo técnico han conquistado el corazón de los aficionados chinos.

Durante la concentración en Kunming, Camacho rechazó con cortesía varias veces las invitaciones de comida y cena, para concentrarse en analizar los videos con sus ayudantes. "Camacho es superprofesional", comenta Yu, vicepresidente de la Asociación de Fútbol de China.

Camacho anunció, en la multitudinaria rueda de prensa de ayer, que Li Wei Feng vuelve a ser el capitán de China. El central llevará el brazalete sustituyendo a Du Wei. Desde 2008 no era capitán. Hoy, después de 1.166 días fuera de la selección, Li Wei Feng jugará su partido número 110 con China. Como curiosidad, con Singapur juegan Shi Jia Yi y Qiu Li, dos jugadores chinos que se han nacionalizado.

China jugará con un sistema 4-2-3-1, el mismo dibujo que utilizaba el exseleccionador Gao Hong Bo. El técnico no ha querido variar el esquema en tan sólo diez días de trabajo. Ha trabajado la presión y recuperación de la pelota. Lo único que preocupa a Camacho es el mal estado del césped.