Liga Adelante | Deportivo
Lendoiro aún tiene tres frentes que solucionar
Deuda con el Vecindario, descartes sin destino y Rubén
Lendoiro se mostraba la semana pasada a favor de la huelga porque consideraba que se podía aprovechar para solucionar muchos otros problemas del fútbol español. En lo particular, el retraso en el inicio de Liga le beneficiará porque tendrá una semana más de plazo para arreglar el problema con el Vecindario y así poder inscribir a los fichajes, algo que no ha podido hacer todavía. El CSD le denegó la cautelar, tal y como desveló La Voz de Galicia, por lo que debe hacer frente a los 390.000 euros de deuda con el club insular, a los que hay que sumar intereses y costas (unos 700.000 euros).
Ahora, el Depor puede devolver el caso a la justicia en busca de la cautelarísima. Si la recibe, podrá inscribir a los nuevos jugadores y esperar con calma al fallo del juez con el mercado ya cerrado. Si no, deberá de pagar al Vecindario antes del 31 de agosto para inscribir a sus seis fichajes: Lux, Ayoze, Bruno Gama, Salomão, Jesús Vázquez y Xisco.
La plantilla.
Los otros dos frentes son deportivos. En las próximas horas se podría cerrar la eterna operación con el Getafe del trueque de Rubén Pérez por Borja, eliminando así un problema. Más complicada es la situación con los cuatro descartados a los que se les busca destino: Bodipo, Morel, Iván Pérez y Seoane. Oltra no cuenta con ellos, pero tanto técnico como club saben que si no logran un traspaso o una cesión tendrán que darles dorsal y ficha para la Liga.
Pendiente de Aranzubía y Andrés Guardado
Además de los tres frentes abiertos que debe solucionar, Lendoiro está atento a las posibles salidas de Guardado y Aranzubía. Todavía quedan 13 días de mercado y cualquier cosa es posible, aunque ambos casos son diferentes. El del mexicano ha sido uno de los culebrones del verano, con el Sporting de Lisboa como principal candidato. Sin embargo, los 5 millones que ofrecieron no convencieron a Lendoiro y actualmente está sin pretendientes y quedará libre en junio. Si al final llega un oferta que satisfaga, se irá y su hueco no será cubierto por nadie. Aranzubía, por su parte, cuenta para Oltra, no ha forzado nada para salir y el club no se ha movido para traspasarle. El guardameta riojano sólo se vendería por una cantidad que se acerque a su cláusula (8 millones) y en principio habría que fichar un relevo.