"El partido de nuestras vidas será ante Brasil"

Ese partido que se programa en la Play Station, el que se sueña desde pequeño, el que todo el mundo espera a nivel absoluto, ese deseado España-Brasil, será el choque estrella de los cuartos de final del Mundial Sub-20. El domingo, en la localidad colombiana de Pereira, un grupo de jóvenes talentos españoles tendrá la oportunidad de medirse a la gran referencia histórica del fútbol mundial. Histórica porque ahora mismo ese cetro corresponde, precisamente, a La Roja, pero también porque los brasileños han sido y serán el principal rival a batir, el grande entre los grandes del panorama futbolístico mundial.

Lo dejó caer Canales tras el agónico cruce de octavos ante Corea del Sur: "Será un partido muy bonito, especial, no sólo por ser unos cuartos, sino por tratarse de Brasil. Aún así, debemos hacer nuestro fútbol, sin importarnos el rival que tengamos enfrente".

La sensación de encontrarse ante una cita inolvidable ha ido en aumento según se va acercando el día del choque. Saber que los brasileños, su aureola, sus manías (existe un aislamiento hacia la Prensa impropio de categorías juveniles) están sólo una planta por debajo de la de España activan la adrenalinada. "Hay que ganarles", se rumia cuando se les ve bajar al comedor desde la cristalera del ascensor.

"Es un encuentro que nos hace mucha ilusión. Para la mayoría, es el partido de nuestra vida. Unos cuartos de final de un Mundial ante Brasil es con lo que hemos soñado siempre. Ahora nos toca disfrutar y ganarlo, claro", dijo el portero Álex con una sonrisa en la cara cuando se le preguntó.

El mismo brillo de ojos mostró el central Marc Bartra, ilusionado por poder frenar el siempre importante arsenal ofensivo de los brasileños en ataque: "Es un equipo histórico. Contra Brasil se juega pocas veces en la vida y hay que disfrutarlo. Tanto ellos como nosotros somos dos selecciones que estamos dando muy buenos resultados y veremos quién gana esta vez el pulso. Pero bueno, los brasileños pensarán lo mismo, así que va a ser un partido muy disputado y abierto. Ojalá podamos pasar nosotros a semifinales".

Para aliviar nervios y tensiones, Lopetegui y el cuerpo técnico planearon ayer un paseo por Pereira que concluyó en un conocido Centro Comercial. Allí, los internacionales españoles pudieron disfrutar jugando al billar y a los bolos. Un entretenimiento con el que poder reírse y pasar un buen rato. Lo que les llega a partir de ahora también es como para divertirse. Es el partido de sus cortas vidas. Y es ya mañana.