El Elche mejora su imagen ante todo un Villarreal

El Villarreal despidió ayer la pretemporada con la victoria en el Festa d'Elx. Un triunfo que deja un sabor agridulce en las filas del equipo castellonense, que no evidenció la superioridad de su proyecto sobre el terreno de juego. Y eso que Juan Carlos Garrido se lo tomó mucho más en serio que Bordalás. De salida apostó por un equipo titular que bien puede parecerse al que la semana que viene afrontará la previa de la Champions ante el Odense. El Elche, por su parte, presentó un once de circunstancias condicionado por la ausencia de los lesionados y las molestias de Nicki Bille y Ángel que obligaron al entrenador a improvisar en la delantera con Kike Mateo.

El primer tiempo careció de ritmo. Los ilicitanos asumieron el papel de rival de inferior categoría y cedieron el protagonistmo a su rival. El Villarreal tuvo la posesión de la pelota pero tuvo muchos problemas para llegar a la portería de Juan Carlos. De hecho, sólo destacaron dos oportunidades. En la primera, Marco Rubén mandó al palo derecho un remate desde dentro del área mientras que en la segunda, una acción de estrategia originada, tras un córner forzado por un disparo de Wakaso, la aprovechó el central Zapata para adelantar a su equipo justo antes del descanso. Kike Mateo puso el único peligro del Elche, que bastante tuvo con aguantar el tipo con la presencia de tres canteranos en el once titular.

El Elche mejoró con los cambios. Bordalás le devolvió la forma a su equipo, que recordó por momentos al de la pasada temporada. El dominio pasó a ser de los ilicitanos aunque las ocasiones se repartieron. Juan Carlos se creció ante sus ex compañeros. Primero Gerard y luego Marco Ruben no encontraron hueco en la portería. A Luismi Loro también se le negó el gol en un mano a mano con Diego López. La afición se animó con el juego del Elche al mismo tiempo que los entrenadores veían con preocupación cómo Nilmar y Acciari se retiraban del campo por lesión. El brasileño, con un golpe en el cuádriceps; y el argentino con un fuerte esguince en su tobillo derecho que le convierte en duda con vistas al estreno liguero. A dos minutos para el final, Mano le sirvió en bandeja el tanto de la sentencia a Marcos Gullón, que marcó de cabeza.