Royo pulirá el equipo con tres amistosos en sólo cinco días

Tan sólo quedan dos semanas para que se inicie la liga y el Huesca espera llegar en plenitud de condiciones a su estreno liguero ante el Barça B. Los próximos siete días fueron calificados por Ángel Royo como "el stage de competición", ya que en la próxima semana el equipo jugará tres partidos que medirán su potencial: Mirandés, Osasuna y Logroñés.

Los azulgranas volverán hoy a los entrenamientos con una doble sesión, pero el trabajo duro comenzará en Logroño, donde estarán los oscenses del 10 al 14 de agosto, para desconectar de las fiestas de San Lorenzo. Unos días que aprovechará Ángel Royo para perfilar el once y el sistema del primer partido de la temporada.

Este stage se abrirá el día 10 en Haro contra el Mirandés, de Segunda B. El segundo partido será ante el Osasuna en Tafalla, el duelo más duro de toda la pretemporada. Y el último partido de esta concentración, el domingo 14 en Las Gaunas ante el Logroñés, una semana antes de que empiece la liga.

El Huesca también aprovechará esta concentración para realizar cuatro entrenamientos que completarán el trabajo que tiene planificado Ángel Royo. Una semana exigente que servirá para que el Huesca alcance la primera jornada liguera de la mejora manera.

Tocados. En el partido del sábado ante el Villarreal B no jugaron Ochoa, David Vázquez y Gilvan. Ángel Royo decidió prescindir de ellos para tenerlos en perfectas condiciones esta semana. Si finalmente los tres están en condiciones de jugar, las únicas bajas por lesión serán David Bauzá y Óscar Vega, que ya afrontan la recta final de su recuperación.