Sergio pide sitio en cinco minutos ante el Newport

A medio gas, con el test definitivo del Swansea en el horizonte, el Betis ganó ayer su segundo partido de la gira británica al Newport County, un equipo de la Blue Square Bet Premier (algo así como una quinta división inglesa). El Argus, tabloide local, titulaba así la portadilla de su sección de deportes: "Un gigante español en la ciudad". Y así se tomó el Newport el partido. Los Exiles, un equipo que cumplirá cien años de historia cuando empiece 2012, es el tercer o cuarto club más poderoso de Gales pero su distancia con la élite es sideral. Pero el Newport, la Amber Army como también lo llaman sus hinchas, tienen orgullo y esperaban dar más guerra. Por eso le sorprendió el eléctrico inicio de Sergio, ese chico del que se habla y no se para en esta pretemporada. El jugón que amenaza con pasar por delante de Salva Sevilla y Matilla tuvo cinco minutos iniciales deslumbrantes. Por cómo se mueve, ligero y apareciendo en todas las posiciones, es una delicia verlo jugar. Sergio hizo todo en esos primeros cinco minutos. También el gol después de un buen centro de Jefferson Montero, siempre eléctrico, pero no siempre acertado. Sergio fue titular por la lesión de Rubén Castro pero su posición de teórico extremo derecho fue de mentira. A él le gusta jugar entre líneas, enseñarse. Es una aparición ilusionante

Cuando Jorge Molina hizo el 0-2, el Betis se relajó. Su historia, su escudo, no le permite perder partidos ante rivales tan débiles. Pero Mel pidió que los futbolistas no pisaran del todo el pie así que el partido tuvo cierto aire de tostón los 75 minutos restantes. Le puso la guinda Arzu, ese incomprendido que, con sus defectos, siempre será un excelente futbolista. Eso nunca se lo podrán quitar. Espera otro test ante el Neath en horas. Mel está tranquilo. Está en los plazos previstos.