Cristiano, rey de América

Decía Jorge Vergara, presidente del Chivas, que para su equipo este partido era como un derbi Real Madrid-Atlético, porque el conjunto mexicano se identifica con la filosofía del rojiblanco. Para el Madrid, sin embargo, no fue ni un puerto de segunda categoría en este rodaje de pretemporada, tal y como sucede en los derbis madrileños, donde el Atlético no gana desde los últimos once años. El Chivas aguantó el ritmo del equipo de Mourinho hasta que Cristiano quiso. Marcó tres goles en nueve minutos, del 72' al 81', para resolver un partido que se puso complicado en la primera mitad. El primer Galibier de la 2011-12 vendrá el 14 de agosto ante el Barcelona (ida de la Supercopa), pero Cristiano demostró que, en cuanto hay pendiente en la carretera, tira del pelotón.

Cristiano marcó la campaña pasada 40 goles en Liga. Ayer evidenció una actitud fiera en un partido poco atractivo del Madrid en la primera parte. Se peleó, se enfadó, fue amonestado y celebró con rabia su primer gol. Su manera de festejar el tanto, agarrando el balón de la red y dándole una patada al aire, vino a decir algo así: "¿Cómo podemos llegar a estas alturas con empate a cero? ¡Somos el Madrid!". Tres minutos más tarde, después de toparse con el larguero, transformó un penalti, provocado por Pepe, y cerró la cuenta con un gol a pase de Özil. El equipo de Mourinho tardó mucho en derribar el muro de Luis Michel.

Colapso.

Cinco titulares ante los Galaxy (Carvalho, Marcelo, Granero, Coentrao y Kaká) repitieron frente al Chivas. Xabi Alonso se cayó del once a última hora por unas molestias en la espalda. Coentrao ocupó su lugar. El portugués volvió a rendir a buen nivel en el mediocentro (jugó ahí los 90 minutos), firmando triangulaciones muy interesantes con Cristiano. Pero hubo colapso en la banda izquierda. Kaká fue una sombra del que jugó ante los Galaxy. El brasileño no engrasa con Özil, que al principio se volcó en la derecha. En la izquierda se juntaban Marcelo, Coentrao, Cristiano, Kaká y hasta el propio Özil. Mou se percató de la congestión y cambió a Kaká por Callejón tras el descanso. En la primera mitad, sólo Benzema inquietó al portero mexicano y Cristiano estuvo cerca del gol en una jugada de estrategia en el 38'.

Pero si hubo un nombre destacado en el primer tiempo ese fue Varane. El central mostró las cualidades por las que le fichó Zidane. Intervino en tres acciones en las que estuvo perfecto al corte. Varane puede caminar solo en este proyecto, porque tiene una planta impresionante, pero bajo la tutela de Carvalho, que le protegía desde la izquierda. Dejó buenas sensaciones en una noche en la que el lobo se asomó, pero no fue a por las ovejas. Incluso, estuvo a punto de marcar un gol de cabeza en el 36'.

El Chivas, más rodado (empieza su Liga mañana), no pudo en la primera parte con el Madrid. En la segunda, Benzema, muy activo todo el partido, tuvo tres ocasiones claras, pero se le resistió el gol. Mourinho insiste en traer un tercer delantero (la temporada pasada se jugó la final de Copa y las semifinales de Champions sin él). Mientras, Cristiano le sigue resolviendo los partidos disputando el partido completo, sin descanso.