Guardiola llamó a Cesc para pedirle paciencia

Xavi, buen amigo de Cesc (al igual que Piqué o Puyol), aseguró la semana pasada que el centrocampista de Arenys "está sufriendo mucho" al ver que su futuro no termina de aclararse. Pasan las semanas, él sigue en Londres entrenándose en solitario, y ni Wenger ni el Barcelona dan su brazo a torcer en las negociaciones por su traspaso. Para terminar de aderezarlo todo, Guardiola, en su primera comparecencia pública de la pretemporada, dijo sobre su sufrimiento que "es parte del proceso y hay que aguantar", que "no me gustaría que un futbolista llegara y se me plantara" y que "la prioridad que tenemos en estos momentos es la de fichar a un delantero". Con todos estos inputs, es fácil advertir que la moral de Cesc no pasa por su mejor momento.

Pues bien, al parecer, y según informó ayer la emisora RAC1, Guardiola, al término de esa conferencia de prensa, llamó personalmente al centrocampista del Arsenal para pedirle paciencia y tranquilidad, pues intuye que las negociaciones entre clubes todavía pueden dilatarse más en el tiempo. De hecho, ya lo avisó el martes: "Intentaremos traerlo, pero hasta el 31 de agosto hay tiempo". De igual modo, Pep le hizo saber a Cesc que sigue siendo un futbolista importante para su proyecto, que aseguraría, además, la continuidad de un modelo de juego basado en el fútbol de toque. La llamada habría servido también para evitar que el centrocampista se declarase en rebeldía de manera oficial -hasta la fecha no se ha entrenado debido a unas molestias musculares-, circunstancia que podría entorpecer las conversaciones entre ambas entidades.

Paciencia. Esa es la palabra clave de todo este asunto. Lo es para el jugador (quien le manifestó al técnico culé que no sabe si podrá aguantar esta situación hasta el 31 de agosto), pero también para el Barcelona. Guardiola le dijo a Cesc que estuviera tranquilo, pues, a diferencia de otros años, el Arsenal ha aceptado negociar y que es una cuestión de tiempo que se produzca el ansiado acuerdo entre clubes.

Desde la entidad londinense se filtra que la fecha límite para traspasar a su capitán es el 30 de julio, día en que se juega la Emirates Cup. El Barça, por su parte, se da casi un mes más de plazo a partir de esa fecha. Sea como fuere, hay culebrón todavía para rato.