Mel, torero: "¿Emaná? Es lo de todos los veranos"

Pensaba que ya no me ibais a preguntar por Emaná", soltó Mel con una media sonrisa a la mitad de su primera comparencia pública de esta pretemporada, ayer por la mañana. Después de una campaña, la pasada, durante la que hizo un máster sobre lo que significa llevar a un futbolista tan especial como Achille, nadie mejor que el técnico podía torear el problema-culebrón que se le viene encima este verano con el camerunés si no llega una oferta que satisfaga al club y al jugador. "Tengo un compromiso con Achille, él es quien toma los tiempos y tomará la decisión final si no perjudica al Betis. Ha tenido una posibilidad de salir y ha dicho que no. Pero nadie ha afirmado que queremos que se vaya", afirmó el entrenador.

La realidad es que Mel adoptó el papel que se le presupone para no devaluar a un futbolista por el que el Betis espera sacar dinero, pero luego, entre líneas, soltó una ironía con el hecho de que, tras varias temporadas a punto de irse, el camerunés no haya salido aún: "Es complicado que se conjugue lo que el Betis quiere y él busca: todos los veranos es lo mismo".

"Yo estoy en mi sitio y Mel es el técnico. Respeto lo que hace", aseveró con frialdad el propio Emaná durante una entrevista a la que le sometieron los usuarios de la red social Twitter. Evidentemente, el jugador africano (o sus asesores, más bien) elegían las preguntas, pues respondió unas 50 y había más de 200: "Me gustaría quedarme en el Betis pero no bajarme el sueldo. ¿Si se les pasa a otros con su trabajo, qué harían?". Ya son varios los días en los que se ha visto al entrenador verdiblanco conversando con su jugador, en una terapia para no enrarecer los primeros entrenamientos. Pero Emaná está enfadado, sin duda, sobre todo con la posibilidad de que le puedan reducir el sueldo a la mitad si no acepta alguna de las ofertas que se presenten por él.

Un 'dardito' para Marcelino

Mel quiere llegar a tope al primer partido oficial del año, el derbi, porque sabe de su importancia psicológica y social para el beticismo y para sus propios jugadores. Aunque aseguró tener una "gran relación" con el técnico del Sevilla, Marcelino, tiró un dardito al asturiano por haber asegurado que el Betis "no" tenía nivel para competir con el Sevilla: "Si gano el derbi seré el hombre más feliz del Mundo esa noche. Hay gente que ha dicho que no tenemos equipo para competir con ellos, así que ya sabemos fácilmente el objetivo: la permanencia".