"Si Alexis va al Barça, el Madrid no ganará más"

¿Qué le ha hecho más ilusión: meter al Udinese en Champions o al Granada en Primera?

Las dos cosas son una hazaña. Conseguir una plaza de Champions por delante de equipos como Roma, Lazio o Juventus es para estar orgulloso. Pero me ha hecho una ilusión especial el ascenso del Granada, su trayectoria hasta llegar a Primera. Estuve en España viendo las eliminatorias contra el Elche y fue muy emocionante. Pero luego mi mayor premio fue el entusiasmo de los aficionados. Incluso vi a algunos llorar de alegría. Eso no tiene precio.

El que parece que sí tiene precio es Alexis: 50 millones. ¿No le parece mucho?

Al revés, me parece poco. Es más, me darían un disgusto si ponen el dinero encima de la mesa y se lo llevan. Porque lo que yo querría es que Alexis Sánchez se quedara en Udine, nos ayudara en la Champions y siguiera creciendo con nosotros. No tenga duda de que si se queda aquí, el año que viene valdrá más de cincuenta millones de euros. Es el mejor futbolista de su generación. Es como Cristiano Ronaldo cuando tenía 22 años.

¿Eso lo dice porque se lo quiere quedar o porque lo quiere vender? No está muy claro.

Lo digo porque lo pienso de verdad. Mire, nosotros manejamos más de cien jugadores, llevamos en este negocio mucho tiempo y sabemos cuando tenemos un diamante. Alexis Sánchez lo es. Si el Barça lo quiere tendrá que pagar su justo precio, que son cincuenta millones. No hay que verlo como una operación cara, dado que si el Barça le ficha estoy seguro que el Madrid no ganará nada el año que viene. Esto ya es suficiente como para justificar y pagar su precio. Es la guinda que le falta al pastel de Guardiola, un jugador que marca diferencias. Esas son las cuentas que deben echar, además de entender que fichan a una estrella emergente de sólo 22 años que les dará muchas alegrías por lo menos a lo largo de una década. Cuando uno compra un jugador no debe fijarse sólo en el precio. Si el Barça paga cincuenta millones por Alexis hará un buen negocio. Pero son ellos los que deben darse cuenta y dar un paso adelante.

¿Tiene más ofertas por él?

Sí, aunque insisto en que casi contra mi voluntad. La verdad es que el Manchester City está haciendo una oferta más generosa que la del Barcelona. No se trata de entrar en una puja, pero si Cesc vale cuarenta millones y Neymar o Agüero cuarenta y cinco, yo digo que Alexis Sánchez vale cincuenta. Como el precio lo pongo yo, pues es lo que hay.

En Barcelona empiezan a estar de los nervios, que si viene hoy, que si vuela mañana. ¿Se ha puesto un plazo para cerrar el traspaso?

No, aunque supongo que, de hacerse, se hará en el último minuto del último día. Es lo normal en estos casos. Ya digo que yo no tengo ninguna prisa por vender a Alexis.

Se nota que es usted un negociador de la vieja escuela, ¿le molesta que se lo digan?

No, y hasta lo considero un cumplido. Mire, por centrarnos con España, yo llevo en el fútbol desde los tiempos de Ramón Mendoza, que por cierto era un buen amigo. De Mendoza tengo que decir que sabía bien de qué iba esto. En esto de fichar y traspasar era un lince. Hicimos algunas cosas juntos, como el traspaso a nuestro equipo de El Soso.

¿El Soso...?

Sí, de Gallego. Le llamaban así en España... guardo buen recuerdo de él. Era un buen profesional. Le mando un saludo.

De modo que sí, que es usted un directivo de la vieja escuela.

En Italia soy el más antiguo, pero me he ido adaptando. Cuando me preguntan el secreto del éxito del Udinese siempre digo lo mismo: trabajo, ilusión y suerte. Porque aunque hay que llevar los clubes como una empresa también hay que saber que con los equipos no es exactamente así. El club puede acertar en todo y el delantero enviar un balón al poste en una final. El que no entienda esto es mejor que se dedique a otra cosa para no morirse de un disgusto.

Siendo usted de Friuli, nacido en Udine, se entiende que sea el dueño del Udinese, pero lo del Granada lo tiene que explicar. ¿Por qué entró en un club español de Segunda B que estuvo al borde de la desaparición?

Hay gente que prefiere la caza, otros la pesca y algunos las mujeres... bueno, a algunos también les gusta todo esto junto, además de los coches. A mí me gusta el fútbol. Es mi pasión. Nosotros movemos muchos jugadores jóvenes, tenemos ojeadores por el mundo y compramos lo que creemos que puede dar resultado. El Granada ha dado salida a muchos de nuestros buenos futbolistas y estoy orgulloso de que haya sido así. Todo el mérito es de mi hijo Gino y de Quique Pina, que lleva muchos años con nosotros y es de toda confianza. Ellos mueven los hilos.

En Granada mucha gente no sabía de usted, del patriarca de los Pozzo, del 'alma mater' del emporio. Si va ahora por allí se lo comen a besos. ¿Qué planes tienen para el Granada?

Eso lo llevan más entre Gino y Quique, pero la idea es consolidar al equipo en Primera. Pondremos todos los recursos necesarios para que sea así. Una vez asegurada la categoría, que será el objetivo del año que viene, poco a poco trataremos de hacer del Granada un equipo fuerte. Ya aviso que no lo vamos a descapitalizar, sino todo lo contrario: seguiremos inyectándole buenos futbolistas. La verdad es que la gente de Granada se lo merece. A mis 71 años todavía me emocioné el día del ascenso. Me emocioné de ver a una hinchada tan caliente y animosa, tan volcada con su equipo. Seguro que la temporada que viene no va a ser fácil ganar en Los Cármenes, y no lo será porque el Granada tendrá un buen equipo y la mejor afición.

¿Tienen los Pozzo el cien por cien del Granada?

Tenemos el control del club, que es lo que importa. Tenemos el control y la ilusión de ayudar al Granada con buenos jugadores y con recursos. Ahora que está en Primera lo reforzaremos aún más y tendrá una plantilla competitiva que, esta primera temporada, luchará con posibilidades por la permanencia.

Bueno, por resumir: ¿seguro que no vende a Alexis por menos de cincuenta millones?

El precio no es negociable, la forma de pago se puede estudiar. Pero vale 50 millones de euros.