"Antes que futbolista hay que ser deportista"

Ernesto Chao ha pasado del anonimato a ser conocido en todo el país gracias a un gesto que le honra como deportista y como persona. Este fin de semana se disputaba en Iraugui (País Vasco) un torneo de fútbol alevín, donde el Sevilla se proclamó vencedor tras ganar la final al Espanyol por penaltis. La historia no hubiera pasado a mayores de no ser por el gesto que tuvo Ernesto Chao, técnico blanco, con el rival: decidió junto a sus chavales entregar al Espanyol la Copa por haber jugador mejor: "Ellos eran el único equipo que competía siendo alevín de primer año. El torneo era de altísimo nivel y fueron los que mejor jugaron. Les pudimos vencer sólo en los penaltis y propuse al entrenador rival incluso antes de lanzarlos que se quedaran con el trofeo por puro merecimiento, algo que cumplimos a pesar de ganar los penaltis".

El gesto ha sido acogido con aplausos en toda España, incluso el propio Del Nido ha respaldado la acción de Chao, quien se explica: "Formo deportistas y después futbolistas. Mis jugadores no tuvieron dudas y fueron ellos quienes se lo dijeron a los jugadores rivales". Al primer escalón del podium subió el Espanyol, quien agradeció públicamente el gesto del Sevilla, que ya tiene algo más de lo que presumir en su fabulosa cantera.