Jaime, portero deseado en el regreso a Segunda

Jaime Jiménez, todavía guardameta del Elche, es el arquero que tiene entre ceja y ceja el Real Murcia para su regreso a Segunda División. El manchego acaba contrato el 30 de junio y aunque su deseo pasa, según sus declaraciones a AS hace unos días por "renovar, siempre y cuando me sienta respetado...", en Nueva Condomina ya se han movido para tratar de convencerle de que su sitio está en la capital del Segura (que bien conoce de su etapa en el Ciudad, donde sigue estudiando y conserva una vivienda en propiedad).

Sergio Fernández ya dejó informes muy positivos del meta franjiverde y se da la circunstancia de que el Valladolid también le tanteó hace unos meses, club del que procede casualmente Chuti Molina, responsable de los fichajes murcianistas. Jaime tiene varias novias en Segunda e incluso se habla de que pueda tener alguna opción de recalar en el Betis. Con todo su futuro parece estar entre Elche y Murcia, teniendo los rectores del Martínez Valero cierta prioridad. Está en su mano, y en la oferta de renovación que le propongan.

Acciari y Mantecón.

También del Elche podrían venir Acciari y Mantecón. El acuerdo con el primero es total y en el Martínez Valero ven prescindible al argentino, aunque habría que negociar el año de contrato que le resta. En el caso de Mantecón, cuyo interés ya anunció AS el 18 de mayo, podría estar de por medio también el Hércules.

Experiencia y buenos números en Segunda

A Jaime Jiménez ya le quiso el Real Murcia hace tres temporadas pero finalmente se optó por la contratación de Juantxo Elía. Antes, había firmado grandes temporadas en el Ciudad de Murcia donde una grave lesión en la mano le impidió dar entonces el salto a un Primera. La venta del equipo de Pina a Marsá frenó su proyección debido a la mala campaña del Granada 74 (jugó casi todo el curso pero bajó a Segunda B) y posteriormente recaló en el Elche donde no ha podido brillar hasta la salida de Willy Caballero al Málaga. Desde entonces, y con él bajo palos, el Elche sólo ha dejado escapar dos empates en casa y sus números defensivos son realmente buenos. También ha sido clave en el playoff de ascenso, donde ganó fama parando dos penaltis en el partido de ida ante el Granada.