Milla ensaya sin cambios

Luis Milla, seleccionador de España Sub-'21, ensayó en el Viborg Stadium con el mismo equipo que derrotó a la República Checa y Ucrania para acceder a las semifinales del Europeo de Dinamarca, sin un solo cambio en el equipo titular para disputar la semifinal ante Bielorrusia.

El cansancio acumulado por los internacionales españoles no es un factor que vaya a inducir a Luis Milla a introducir los cambios que anunció en el equipo para semifinales. Si cumple lo ensayado en el escenario del partido repetirá equipo por tercera vez consecutiva.

Hay jugadores que arrastran ligeras molestias, como Álvaro Domínguez, con un golpe del último encuentro, o Thiago Alcántara, el más cargado muscularmente tras jugar los tres partidos completos. Sin embargo, los dos recibieron peto de titular.

España jugaría ante Bielorrusia con De Gea, Montoya, Botía, Víctor Ruiz, Didac Vilá, Javi Martínez, Ander Herrera, Thiago, Mata, Muniaín y Adrián. El primer objetivo, el pase a los Juegos Olímpicos aún no está conseguido y es lo que conduce a no realizar rotaciones.

En el último entrenamiento antes de la semifinal, el buen ambiente marcó la sesión de trabajo, con bromas al pequeño del grupo Iker Muniaín, en un ejercicio de carreras en el que se adelantó a todos, y hasta dejaron cánticos abrazados todo el grupo en uno de los ejercicios.

Luis Milla los puso serios cuando tras los rondos y los ejercicios de velocidad, ensayaron disparos a puerta tras centros desde las bandas. La intensidad marcó la parte final de la parte abierta a los medios de comunicación en el estadio donde mañana se juega su pase a la final desde las 18.00 horas.

César Azpilicueta demostró que el percance muscular que le impidió acabar el entrenamiento del lunes en Silkeborg ha quedado en un susto. Tras pasar por las manos de los fisioterapeutas de la selección, ha podido entrenarse al mismo ritmo que el resto de sus compañeros, recuperado de la sobrecarga que sufría en el cuádriceps de su pierna derecha.

La selección pasó la mañana en su hotel de concentración, donde estudiaron a su próximo rival, Bielorrusia, con los vídeos preparados por el cuerpo técnico. Tras la comida y una hora para la siesta se desplazaron a Viborg, localidad que está a unos 40 kilómetros, para entrenar y regresar al cuartel general hasta la hora de la semifinal.

El miércoles cambiarán el horario de las comidas por la hora del partido. Comerán a las 12.30 horas y la merienda será a las 15.30.