La desbandada y Wilshere ocupan ahora a Wenger

Wenger sabe que cuatro de sus hombres clave quieren salir del Arsenal. Junto a Cesc, suenan los nombres de Nasri, pretendido por el Manchester United, Clichy (Liverpool) y Bendtner (Juventus y Bayern lo siguen). De confirmarse, el técnico debería actuar con celeridad, por lo que tiene al delantero Gervinho casi listo para firmar, cosa que calmaría la decepción de los seguidores gunners.

Pero a Wenger lo que le preocupa es el centro del campo. Recuperado el galés Ramsey de una grave lesión, Wilshere pasaría a ser el timón. De ahí que el entrenador se enfrentara con los responsables de la Federación Inglesa. Estos querían llevarlo al Euro Sub-21, pero su negativa surtió efecto, como el Barcelona con Sergio Busquets.

Wilshere fue sometido a unas pruebas por el Arsenal con una máquina de nueva generación llamada Omega Wave (también utilizada en el Barça) que pronostica el estado muscular de los futbolistas. Después de analizar los resultados, el resultado fue claro: si el inglés jugaba con sus compañeros en Dinamarca corría un fuerte riesgo a lesionarse, cuando Wenger lo quiere a tope para la pretemporada sabedor de que Cesc tiene muchos números de irse del Emirates.