Fontàs
"Ir a entrenar vale la pena sólo por ver jugar a Messi"
Puede jugar de mediocentro, pero se siente feliz actuando como central. Es zurdo y eso se valora mucho en el mercado. Disfruta de unas merecidas vacaciones y se perderá por las Maldivas. Explica para AS sus sensaciones.
¿Qué hará en sus vacaciones?
Ante todo desconectar. Es básico. Estuve dos semanas sin hacer nada, por orden del club, aunque ahora ya, poco a poco, comienzo a practicar algún deporte que otro.
¿Cuál?
Pues mire. Me gusta el tenis y también comencé a hacer carrera contínua.
¿Y sabe desconectar?
Del todo. Sé que la próxima temporada será larga y deberé demostrar muchas cosas.
¿Qué recuerdos tiene de la pasada campaña?
Si los Clásicos fueron brutales para los aficionados y la prensa, vivirlos desde dentro fueron durísimos. Sufrimos mucho.
Como hacer una mili.
Bueno, a mí no me tocó vivir esa experiencia, pero fue como realizar un postgrado. Piense que en menos de 20 días nos lo jugábamos todo y ante el eterno rival. No había un margen para el error.
Y cayeron en la Copa.
Sí, pero pudo ganar cualquiera de los dos equipos.
¿Cómo trata Guardiola a los jóvenes que suben del filial?
Como uno más del grupo. Nunca me sentí diferente al resto. Es más, siempre tuve la sensación de llevar allí toda mi vida, tanto para lo bueno como para lo malo.
¿Y tan buen rollo hay?
No se lo imagina. Todos los que pasaron por allí, por La Masía, ayudan a los recién aterrizados en el vestuario profesional. Puyol, Xavi, Iniesta, Valdés... están comprometidos de una manera brutal. Un consejo de ellos es oro puro para nosotros, que nos empapamos de las buenas intenciones.
¿Tan espectacular es Messi en los entrenamientos?
¡Buah! Por eso hace luego lo que hace en el campo de juego. Vale la pena ir a entrenar sólo por verlo jugar.
¿Y Pep?
Está muy pendiente de todo. Además de saber mentalizar al grupo, cuando ve algo que no le gusta, rectifica y si ve relajación cuando no toca, lo dice.
Usted recaló en el primer equipo definitivamente por la enfermedad de Abidal.
Fue muy duro, aunque pronto lo tuvimos con nosotros y no sabe cómo lo celebramos. Fue el momento en el que Guardiola me comunicó que me quedaba hasta el final de curso.
Y lo aprovechó.
Traté de disfrutarlo. Había jugado en Champions ante el Rubin Kazán (hizo un gol) y el Almería (0-8). Luego encadené seis partidos seguidos con el primer equipo. Estuve en el momento y el sitio adecuado.
¿Y ahora?
A esperar la decisión del club. Soy consciente que ante las estrellas sólo puedo esforzarme cada día al máximo.