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Juan Ignacio Martínez

"La felicitación que más me alegró, la de Paco Gómez"

Flamante nuevo técnico del Levante, y novato en Primera, el que dueño del banquillo albinegro en las dos últimas campañas se despide del cartagenerismo en una entrevista en la que entierra sus problemas con el presidente y manda un mensaje de apoyo y esperanza para su antiguo club

José A. Vera
"La felicitación que más me alegró, la de Paco Gómez"

Lo primero, ¡enhorabuena! ¿Cómo está?

Feliz y muy contento porque la decisión del Levante me da una oportunidad única de llegar a la máxima categoría... y la única que me faltaba. Tengo muchas ganas de empezar a trabajar.

¿Qué fue lo primero que pensó cuando se vio 'de verdad' como nuevo técnico de Primera?

Me acuerdo de toda la familia futbolística que me ha acompañado todos estos años, jugadores, presidentes... De camino a Valencia llamé a todos los dirigentes de clubes, incluso los más modestos, que confiaron en mí. Y a Paco Gómez no le llamé porque ya lo había hecho él la noche del jueves... Gracias a toda esa gente yo he sido mejor o peor entrenador.

¿Cómo fue lo de Paco Gómez?

Me dio mucha alegría porque llevábamos varias semanas sin vernos ni hablarnos. De todas las felicitaciones recibidas fue la que más me llegó. Seguimos teniendo pendiente una comida, aplazada por lo del fichaje por el Levante.

¿Está olvidada toda la tirantez entre su ex presidente y usted?

Por mí, siempre. Y por él, creo que también. Han compensado más todas las alegrías que los 'deslices'. Aunque no hayamos ascendido ni jugado playoff han sido buenos años. Cuando nos sentemos se aclarará todo.

El equipo ha flojeado estos últimos meses, y según varios jugadores se debe, en parte, a la salida de Buitrago. ¿Tanto afectó?

El Cartagena sigue creciendo como profesional y hoy en día hay muchas parcelas imprescindibles. Aquello fue convulso para el equipo porque siempre es clave una persona que haga de conexión entre jugadores, cuerpo técnico y dirigentes... Sí afectó al equipo. El tiempo así lo ha demostrado.

¿Su mejor recuerdo?

Sería injusto decir sólo uno. Los futbolistas me han demostrado con hechos y con sus declaraciones un gran compromiso y afecto. Nos hemos despedido todos y hemos sido una familia. Es cierto que teníamos el sueño de jugar el playoff... pero la segunda vuelta ha sido irregular y en gran parte también por mi culpa, claro.

¿Intentará plasmar en Valencia la idea de fútbol del Cartagena?

Apuesto siempre por el balón. Cuánto más lo tenga menos debo correr tras el rival.

¿Pero eso vale ante el Barça o el Real Madrid?

Es la coletilla. Respetamos a todos los rivales, miedo a ninguno, pero debemos ser inteligentes y en ciertos partidos buscaremos ser más prácticos, con alternativas. Mantengo mi idea, pero antes debo ver el plantel y los 14 contratos.

¿Se lleva a Toché y Botelho?

Se habla mucho de ello, pero no por mí. Manolo Salvador ya los tenía contemplados en su propia agenda y no sé si habrá negociaciones ya adelantadas. Tendré reuniones con el club esta próxima semana para arrancarlo todo.

¿Cómo cambiará el chip de pasar de preparar un partido ante el Huesca a un derbi con el Valencia...?

Cada club tiene su historia y trayectoria. En Primera, por humildad y modestia del Levante, en muchos partidos no hará falta motivar a los jugadores. Seremos de los presupuestos más bajos. Aquí habrá que sacar rendimiento hasta al taquillero.

¿Qué le parece el nuevo Cartagena? ¿Conoce al técnico?

Sólo a nivel personal. Tenemos amigos en común. Desde la lejanía poco puedo decir porque aún están confeccionando el equipo y lo están haciendo con jugadores importantes de Segunda con pasado en Primera. Lo harán bien, serán muy competitivos.

Eso será si no tienen la presión del presidente de ascender.

Eso ya será cosa suya. Pero les deseo, de corazón, que todo les vaya de lujo y si puede ser, que asciendan, claro.