Las bajas solicitadas por Marcelino se paralizan

Si la mayoría del racinguismo aún llora por los rincones la marcha de Marcelino García Toral, hay cinco futbolistas a los que el cambio de entrenador les puede venir muy bien. Son, tal y como adelantó la semana pasada AS, los cinco jugadores con contrato en vigor con los que el técnico de Careñes no contaba y que ya había solicitado al club que se los sacara de la plantilla: Osmar, Diop, Adrián, Arana y Ariel Nahuelpán.

La situación queda ahora totalmente parada hasta tanto en cuanto no se contrate a un nuevo entrenador, aunque también hay que decir que desde las oficinas de El Sardinero no se había movido todavía ficha en torno a esta pretensión del asturiano. Por un lado, se estaba a la espera de qué sucedía definitivamente con Marcelino y, por otro, había algún caso, especialmente el de Manolo Arana, en el que los dirigentes tenían la esperanza de haber podido reconducir la situación con el asturiano.

Pese a que en el último mes el sevillano se equivocó rotundamente en su comportamiento, especialmente en Alicante, frente al Hércules, donde reaccionó de una manera que ninguno de sus compañeros supo entender tras una victoria crucial para la permanencia, y que eso le había condenado definitivamente con Marcelino, en la planta noble del estadio siguen creyendo que los 600.000 euros que pagaron por él al Castellón aún pueden dar sus frutos en cuanto las lesiones le permitan tener la continuidad de la que no ha podido disfrutar en sus dos primeras campañas en Santander.

Algunos de los representantes de los citados futbolistas, alertados por la noticia de AS, ya se habían puesto en contacto con el Racing para saber si realmente debían empezar a mover a sus futbolistas. El mensaje ahora es claro: hay que esperar. Hasta que no se fiche a un nuevo entrenador y, más importante todavía, hasta que no se aclare la situación económica e institucional en que quedará el club, todos los jugadores con contrato en vigor son activos de la entidad. Casos como el de Diop, fijo para Miguel Ángel Portugal y poco menos que inservible para Marcelino animan a la cautela.

Cuidar el césped de los Campos

Tal y como sucedió la temporada pasada, el club está esperando a que concluya la participación del filial racinguista en su afán por ascender a Segunda B para volver a realizar la misma, o parecida, actuación sobre el césped de El Sardinero. Concluida la competición se extenderá un herbicida sobre el césped, después se realizará un agresivo escarificado (una especie de rastrillado con cuchillas) y, más tarde, se realizará la resiembra. Una vez que acaben los partidos se volverá a actuar sobre el terreno de juego que, al contrario que la temporada pasada, no ha acabado en tan malas condiciones.