Noche libre antes del último entrenamiento

La plantilla del Barça se vio liberada ayer del régimen de concentración en el que vive desde que el martes tuviera que adelantar su viaje a Londres a causa de la nube de ceniza que amenazaba con colapsar el espacio aéreo europeo tras la erupción del volcán Grínsvötn en Islandia.

Guardiola, poco amante de tener al equipo recluido, aprovechó la circunstancia de que ayer aterrizaron en Londres los familiares y los invitados de los jugadores para concederles la tarde y la noche libre en Londres. Así pues, cada miembro de la plantilla fue libre de irse a cenar con quien quisiera antes de que hoy afronten el último entrenamiento.

El plan para hoy tiene como seguro el entrenamiento en Wembley y las ruedas de prensa del técnico y dos jugadores y se valora la posibilidad de organizar un entrenamiento matinal que se llevaría a cabo en Loftus Road, el campo que acoge los partidos del histórico Queens Park Rangers. El Manchester, además del entrenamiento de Wembley, ha programado una sesión matinal en Craven Cottage, campo del Fulham.

Antes de disfrutar de la tarde libre, el Barcelona se entrenó por la mañana en la ciudad deportiva del Arsenal, comieron en el hotel 'The Grove' situado en Wattford, a las afueras de Londres y tras el almuerzo se mudaron al centro de la capital para ocupar el hotel que habían contratado en un principio, que dista 300 metros del cuartel general del Manchester United.