Ojo: los maletines son delito penal

Llegados a la última jornada, y con seis equipos peleando por no descender, las primas a terceros (por ganar) protagonizan el debate del momento. Cuentan que el fenómeno es tan viejo como el fútbol, el único deporte (quizá la única actividad legal) que asume que el cumplimiento del deber se estimula si hay dinero de por medio. La prueba es que no hay mucha diferencia entre los gestos de un equipo primado y los de un equipo campeón.

En los últimos 30 años hay casos documentados que coinciden en un punto: jamás ha habido quien cumpla una sanción. Y siempre ha estado prohibido. Antes por el artículo 109 de los Estatutos de la Federación y ahora, desde diciembre de 2010, por el reformado Código Penal, que en su artículo 286 bis fija sanciones, multas o penas de cárcel de seis meses a cuatro años para aquellas conductas que tengan por finalidad "predeterminar o alterar de manera deliberada y fraudulenta el resultado de una prueba, encuentro o competición deportiva profesional".

Tanto José Luis Astiazarán, presidente de la Liga, como enviados de la AFE se han encargado de recordar a los futbolistas la nueva legislación. También Lendoiro insistió ayer en la idea para evitar tentaciones ajenas: "Que nadie olvide que si amañas partidos puedes pasar dos años a la sombra".

Las Vegas.

Diego Rivas, jugador de la Real (y ex del Getafe), es de los que se han mostrado partidarios de las primas por ganar: "Si en lugar de ir a Cádiz de vacaciones puedes ir a Las Vegas, pues lo veo bien". El mensaje apunta al Levante, que ante el Zaragoza no se juega más que el orgullo y que, de ganar, condenaría a su rival y salvaría a los otros cinco con la soga al cuello.

Entre los duelos que deciden el descenso es especialmente morboso el que disputarán en Riazor el Deportivo y el Valencia. Hace 17 años la última jornada les enfrentó con el Depor jugándose el título y el Valencia, como ahora, en teórica posición de comparsa. Ya conocen la historia: 0-0, penalti de Djukic parado por González en el 90' y título para el Barça. Cayetano Ros aportó ayer nuevos datos en El País: cada valencianista recibió una prima del Barcelona de tres millones de pesetas (18.000 euros) y la entrega se hizo en la autopista del Mediterráneo. La cuarta Liga seguida del Dream Team se escribía como las dos anteriores: sólo cambien Valencia por Tenerife y Depor por Madrid.

Pero nadie está libre de pecado. En la temporada 1979-80, el Madrid primó antes al Betis y luego al Sevilla por quitar puntos a la pujante Real Sociedad; ambos lo hicieron y los madridistas fueron campeones. Y también el Depor, víctima del Valencia poco antes, condenó al Albacete en 1995 al vencer 2-8, resultado que beneficiaba al Atlético, que se jugaba el descenso y lo evitó.

Hoy la sospecha será inevitable. Levante, Valencia y Villarreal, los que nada se juegan, podrían ser acusados de ponerle ganas y jugar bien al fútbol. Algo tan surrealista como que un profesional bien pagado juegue mejor si le pagan más.