El Depor no se quita el susto

El Barça pensaba en Wembley y en el Manchester United, eso estaba claro. La pregunta es, por tanto, en qué pensaba el Deportivo. Enfrentarse al Barça, da susto, el descenso, más, y a lo largo de los 90 minutos del partido de ayer dio la impresión de que el conjunto de Lotina prefería no hacer ruido y dar por bueno un empate que le obliga a ganar en la última jornada al Valencia antes de molestar al Barça y poder salir derrotado.

Y eso que el Barcelona, que ayer se despidió de su afición en el Camp Nou, era un equipo plagado de canteranos y de jugadores poco habituales. Se quedaron en el banquillo Alves, Xavi, Pedro y Messi. Casi nada. Pero es que en la grada estaban Iniesta, Puyol, Piqué y Villa. Ni ante este escenario, el Deportivo abandonó su planteamiento defensivo y le regaló el 80 por ciento de posesión al rival. Más vale pájaro en mano, debieron pensar.

Con los coruñeses bien tapaditos atrás en busca de algún contragolpe o algún golpe de genio de Valerón, que ayer se enfrentó directamente al hijo de Mazinho, que tantas veces le marcó, el Barça innovó sistema táctico.

Guardiola decidió jugar con una defensa de tres, situando a Jonathan Dos Santos como falso lateral haciendo el papel que en el Dream Team estaba reservado a Eusebio. No fue la única novedad. Keita fue mediocentro y Afellay jugó de falso delantero centro, desplazando a Bojan al extremo.

Valdés, atento.

Sólo cuando los deportivistas vieron que los resultados del resto de campos en los que jugaban los equipos implicados en la lucha por evitar el descenso no les favorecían, estiraron un poco las líneas, pero entonces se encontraron con un Valdés que nunca se toma día libre.

Dos paradas suyas evitaron que el Deportivo saliera con la permanencia asegurada. Siguen con el susto.