Un gol de Yaya Touré da la FA Cup al Manchester City

El Manchester City acaba de entrar en el club privado de los equipos ingleses que ganan títulos: ayer conquistó su primera copa desde 1976. Como correspondía, el futbolista mejor pagado del mundo, Yaya Touré, marcó los dos tantos más importantes de su historia reciente: el de las semifinales y el de la cita de Wembley ante el Stoke.

La final no sorprendió: Tony Pullis y Roberto Mancini sabían cómo iba a ir todo. El City se encargaría de la posesión y de defender el balón largo del Stoke. El preparador italiano pidió a Balotelli, Tévez y Silva que se movieran con absoluta libertad y el Stoke, sin saber bien cómo defender e incapaz de mantener el balón más de tres pases seguidos, acabó protegiendo al portero. Y así iban llegando las (pocas) ocasiones: David Silva, que estuvo muy participativo, podría haberse convertido en el primer goleador español en una final de copa, pero su lanzamiento salió por encima del larguero.

Delop lo intentaba con sus saques de banda, pero era menos efectivo de lo habitual porque el campo era cinco metros más ancho y no se permite el uso de toallas para secar la pelota. A la hora de partido, Jones se encontró un balón largo que le dejó delante de Hart, aunque el portero le ganó la disputa. Fue un espejismo porque según pasaban los minutos los pupilos de Pullis seguían defendiendo constantemente en su área. Ahí Touré se encontró una pelota sin dueño que acabó entre los tres palos. Con este tanto, el City se pone en órbita y el Stoke se queda con la consolación de la Europa League.