Paco Gómez se encierra con Juan Ignacio y los capitanes

En Murcia (Restaurante Ranga para más señas). Con el objetivo de hacer ver al plantel que el sueño del ansiado playoff es posible (el mismo mensaje que en la edición de ayer de AS enviaba Juan Ignacio) y con el propio míster y los capitanes por testigos. Así se fraguó la comida del 'clavo ardiendo'. Ese al que se agarran presidente y entrenador a siete semanas vista del final.

Casi todo giró en torno a lo deportivo, apenas hubo lugar para cuestiones económicas de atrasos en las fichas (que no nóminas) que aún preocupando a los jugadores no son, hoy por hoy, el principal motivo de inquietud de un plantel que hoy conocerá por boca de sus capitanes el sentir de un Paco Gómez del que sólo les han llegado noticias en forma de críticas (llegó a decir que "eran unas señoritas").

Reunión adelantada.

Fue la forma de zanjar posibles desavenencias y de cerrar filas en estas semanas clave para la entidad con el playoff en juego. La reunión, prevista desde hace fechas, se adelantó a petición de presidente y entrenador, que de esta manera vuelven a mostrar su armonía absoluta. Paco Gómez, molesto por las filtraciones de las 'camisetas de la bruja' (esas que rogó no se cambiaran sus chicos en el partido ante el Recreativo) también les pidió cortar de raíz cualquier filtración con el exterior y en esa línea les avanzó que pedirá explicaciones por esa última fuga de información.

Y mientras Paco López, en el estadio

Llama poderosamente la atención que en esa reunión no compareciera el director general Paco López. Sí estuvo la 'real' mano derecha de Gómez, Manolo Grau. Lo que confirma las distancias entre la parcela deportiva (Juan Ignacio y los propios futbolistas) y el gerente albinegro que a la misma hora que en Murcia comían Paco Gómez, JIM y los capitanes, despachaba otros asuntos en el estadio mientras en sala de prensa comparecía el entrenador del filial, Casimiro Torres. Un técnico en el que el gerente tiene puestas muchas ilusiones de cara a un futuro deportivo todavía sin escribir y pendiente del final liguero. Parcela en la que todo puede ocurrir...