Liga BBVA | Valencia
Unai les puso el vídeo de los horrores... sin sermón
El técnico no fue ayer crítico con sus jugadores pese al 3-6
Unai Emery se encerró ayer 75 minutos con sus jugadores en el vestuario. Era lo primero que hacía tras los dos días de descanso que les concedió tras el ridículo ante el Real Madrid (decisión que no le gustó nada a los dirigentes blanquinegros, como Manuel Llorente le hizo saber al técnico estando aún en Mestalla el sábado). Emery les puso "el vídeo de los horrores", como lo bautizaron los propios futbolistas, pero ni hubo sermón ni mucho menos bronca. Su mensaje se limitó a explicar lo que a su entender se hizo mal ante el Real Madrid y aquí paz y después Pamplona.
No ha sido Unai en los tres años que lleva en el Valencia un técnico dado a los reproches ni a dar gritos en el vestuario. Tampoco ayer. Emery fue una vez más fiel a su forma de dirigir el grupo. Más de dar zanahorias que palos a sus jugadores. Tras unos minutos de exposición en los que transmitió su mensaje, en los que insistió que el objetivo aún no está cumplido y mentó la encerrona que les espera en el Reyno de Navarra, el técnico mandó apagar la luz y dentro vídeo.
Unai trata de pasar página de la humillación que sufrieron a manos del Real Madrid. Espera además que sus jugadores valoren los dos días de descanso concedidos y que sea Osasuna quien rompa los platos rotos, partido en el que tienen una final de dignidad.
Detalles de la charla
La defensa se vio desbordada . Emery insistió en que el error no estuvo en lo adelantada que jugó la defensa sino en los fallos habidos en la circulación y en las constantes pérdidas de balón en la medular, lo que propició que en innumerables ocasiones los cuatro de atrás se vieran desbordados por los merengues.
Los fallos en la presión y pérdidas. En lo que sí insistió el técnico es que la presión colectiva falló estrepitosamente durante toda la primera mitad. Además, no se puede repetir tal cúmulo de pérdidas en la media.
No hizo sangre con errores individuales. Ni el caño de Kaká a Stankevicius ni el fallo de Mathieu en el segundo gol de Higuaín. Emery los comentó, aunque pasó por alto en el vídeo los errores individuales que hubo.
Manos a la obra pensando en el Reyno
Sin tiempo que perder. Unai comenzó ayer a preparar el partido contra Osasuna. El técnico sabe lo mucho que se juega el vestuario en el Reyno de Navarra tras la afrenta del Real Madrid y prepara el duelo como si de una final de tratara. Ayer, en la charla de hora y cuarto, a Emery se le vio muy participativo y encima de sus jugadores en cada uno de los ejercicios realizados en los terrenos de Paterna. El técnico planificó una sesión en la que quiso pulir varios de los aspectos que previamente había hablado con sus jugadores en el vestuario. Insistió mucho en la presión y evitar la pérdida de balones. Para ello recalcó que las jugadas tienen que comenzar siempre desde atrás y los medios no tienen que temer miedo a jugar con los centrales para iniciar las acciones; además, deben buscar siempre la superioridad numérica (dos contra uno o tres contra dos) y no rifar balones. ar balones, vbuscando siempre el dos contra uno, líneas juntas... Presión. Atentos a las segundas jugadas...
Emery optó por no convertir la charla en un debate
No hubo turno de ruegos y preguntas. La única voz que se oyó ayer durante los 75 minutos de reunión entre cuerpo técnico y plantilla fue la de Unai Emery. Los jugadores escucharon, vieron y callaron. No dio opción en esta ocasión el técnico de Hondarribia a los futbolistas para que expusieran los motivos por los que el Valencia fue una caricatura de equipo ante el Madrid. Emery dio una breve y suave charla y después fue comentando las jugadas que el día anterior había seleccionado el cuerpo técnico del partido ante los de Mourinho. Punto y final a la reunión. Al campo a entrenar. Digamos que Emery no quiso convertir la charla en un debate. En la anterior encerrona de esta índole (tras la eliminación contra el Schalke 04), el técnico sí dejó hablar a los jugadores para que dieran su punto de vista sobre los motivos que les había llevado a la eliminación y muchas de las cosas que escuchó no le gustaron (como después fue apuntando a solas a varios de los jugadores que entonces sí dieron su opinión). Sea como fuere, la reunión de ayer fue, en opinión incluso de algún futbolista, mucho más light de lo esperado tras un varapalo como el que recibió el equipo el sábado.