Cladera: "Manzano pidió la disolución del club"

El presidente del Mallorca, Jaume Cladera, se ha sumado al debate generado esta semana con motivo del regreso de Gregorio Manzano. El dirigente bermellón reconoce: "Manzano tiene interpuesta una demanda y en la misma hay un párrafo en el que solicita la disolución del club y no es demasiado afortunado". Cladera critica que Manzano, "opinó que la afición del Mallorca no era una afición incondicional, que no cumplía de la mejor manera posible con su apoyo al equipo y es una opinión que los aficionados la tendrán en cuenta". Por todo ello el dirigente asegura que, "los aficionados tienen un conocimiento exacto de la labor que hizo el señor Manzano en el Mallorca y las consecuencias que tuvieron las decisiones deportivas y económicas. Habrá gente que se manifestará pensando que todo ha sido maravilloso y otros que pensarán que no lo ha sido tanto".

El presidente entiende que el técnico realizó una buena labor en lo deportivo, pero que es responsable directo de la burbuja salarial experimentada en el club y que finalizó con la entrada en el concurso de acreedores: "Ha tenido una buena trayectoria deportiva acompañada de un desarrollo económico catastrófico, y las dos cosas van juntas. Un ejemplo: Si usted tiene un restaurante y tiene un menú de 18 euros con caviar y langosta, posiblemente no le cabrá la gente dentro del restaurante, pero a final de año tendrá que cerrar", argumenta.

Esperan la orden de demolición del viejo estadio Lluís Sitjar

En cuanto a la orden de demolición del Lluís Sitjar, el dirigente bermellón se mantiene a la espera de la notificación oficial que remita el Ayuntamiento de Palma para realizar valoraciones. Cladera apunta que el Mallorca actuará "cuando nos comuniquen los resultados del pleno. Los asesores jurídicos lo analizarán y si piensan que no se han recogido las alegaciones oportunas recurriremos a la sala de lo contencioso administrativo". La idea del club y de la Asociación de Copropietarios del estadio es recurrir a la Justicia ordinaria si es necesario para solicitar la suspensión cautelar de la declaración de ruina y ganar así el tiempo necesario hasta que el nuevo Ayuntamiento de Palma quede organizado una vez se hayan celebrado las elecciones del mes que viene.