Kike García encarna la gran mutación del Alonso Team

De no ver puerta y jugar sin confianza hasta poner de los nervios a la grada de la NC a sentirse importante, a marcar goles y a relanzar su carrera al punto que muchos equipos de superior categoría vuelven a ver en él ese delantero de futuro al que echar el lazo. Ese es el viaje que ha llevado a cabo Kike desde el inicio de la pretemporada hasta la fecha. O más, desde el inicio de la segunda vuelta.

De andar perdido, de tener descolocado a su propio entrenador que en el arranque de la campaña le apretó al punto de señalarle incluso la salida si no lo veía claro a ser piedra angular del equipo. Algo que atribuye "a la confianza y a la continuidad que estoy teniendo y a la mejoría que ha mostrado el equipo entero".

Para Kike, centrado en el objetivo de subir, "y si puede ser de encadenar dos ascensos seguidos y jugar en Primera con el Murcia", lo importante es "seguir igual. No parar. Pero ni aún cuando podamos lograr de forma matemática la primera plaza. Sólo nos podremos relajar cuando estemos celebrando el ascenso. Hasta entonces no habremos hecho nada".

En el mercado.

Hasta entonces lo que ha logrado, amén de hacerse indispensable para Alonso y cambiar su rol es relanzar una carrera que vuelve a llamar la atención en varias secretarias técnicas de equipos de superior categoría: "Está bien pero a mi lo que realmente me gustaría es tirarme muchos años y retirarme aquí".

Trabajo de psicología y control en el peso, claves de la mejora

Un diamante en bruto por pulir. Cuentan que decía iñaki Alonso de Kike cuando lo vio ejercitarse por primera vez en la pretemporada. Antes, como a otros entrenadores de Segunda, ya llamaba la atención por su poderío físico, su capacidad para jugar de espaldas y sobre todo por el enorme potencial de su juventud. Así, el de Durango puso en él todas sus dotes de 'lavacabecitas'. Entre eso, la madurez lógica de quién ya lleva un tiempo en un vestuario profesional y un severo régimen y control alimentarlo (la causas de que haya pasado de parecer pesado a mostrarse estilizado pero potente) se encuentran las causas de la total mutación (para bien) del delantero de Motilla. De ese que el Madrid quiso firmar para su filial.