J. R. López Muñiz
"Pagué lo difícil que era sustituir a Marcelino"
En verano le despidieron del Málaga y se ha ido de segundo de Juande Ramos a Ucrania. Desde allí recuerda su año en Santander, donde pese a asegurar la permanencia sufrió críticas furibundas. No guarda rencor.
Se ha ido bien lejos al Dnipro de Dnipropetovsk...
Bastante, bastante lejos, sí. El proyecto del Dnipro es bueno e interesante y nos ha sorprendido para bien. Las instalaciones son muy buenas y el fútbol ucraniano creo que va a dar que hablar en un futuro.
Para que nos hagamos una idea, ¿el Dínamo de Kiev y el Shakhtar Donetz son como el Madrid y Barça aquí y ustedes son el Villarreal, el equipo de un rico que quiere crecer?
Aquí esos son los dos equipos punteros, lógicamente. Son los dos más conocidos en Europa; ahora, cada uno de ellos sigue en sus competiciones europeas y nosotros (Dnipro) y el Karpaty de Lviv somos los equipos que vamos un poco por detrás de ellos. La idea es en estos cuatro años hacer un equipo que pueda estar luchando con ellos.
Ha dejado de ser primer entrenador para ayudar a Juande Ramos, ¿se le ha hecho duro?
No, no, para nada. La relación que tenemos es muy buena, la comunicación es constante y yo sabía cómo iba a ser la situación. Es un año en el que estoy aprendiendo mucho. Para mí es un paso adelante, que no hubiera dado con otro entrenador.
¿Si le llama un equipo español vuelve o es un proyecto cerrado y seguirá de ayudante?
Tenemos cuatro años de contrato y la idea es intentar finalizar el proyecto y ahora estamos empezando. De momento no me planteo ninguna otra situación.
En Santander y Málaga cumple los objetivos pero le echan. Sus sustitutos en ambos tienen que dejarlo a las pocas jornadas. ¿Les hizo vudú?
No. Vujadin Boskov decía que "fútbol es fútbol" y todos lo entendíamos. Está muy claro. Hay situaciones que se viven en el fútbol que no se comprenden en ningún otro sitio. Estoy muy contento de esas dos temporadas. Cuando estuve en el Racing pude disfrutar de una competición europea como era la UEFA y creo que lo hicimos de forma brillante. Quedamos eliminados por diferencia de goles y en Málaga se cumplieron los objetivos. Eran dos equipos que cogimos, el Racing sobre todo, después de hacer una gran temporada. Además, hice muy buenos amigos allí con los que mantengo actualmente contacto y que son de los mejores amigos que tienes en la vida.
¿Cambiaría algo de lo que hizo a su paso por el Racing?
Pues seguro que sí. Seguro. Estoy convencido de que pagué lo difícil que era sustituir a Marcelino después de conseguir un gran año; yo, también, tengo una manera de ser que, lógicamente, no puedo ni quiero cambiar. Creo que en algunos momentos se valoró a una persona que no era la real, una que se inventaron. Te pone fama gente que no te conoce de nada y como esa gente tiene su eco, los demás van detrás de ella, pero yo estoy muy tranquilo. La fama que me pusieron lo hizo gente que no me conoce de nada.
¿La sombra de Marcelino fue demasiado alargada?
Hombre, él había hecho un gran trabajo en el Racing, de eso no cabe ninguna duda. Cuando un entrenador se marcha de un equipo después de haber hecho un gran trabajo, es muy difícil para el que viene sustituirlo, sobre todo con una afición muy volcada en el trabajo, en los resultados. Es difícil pero era una buena oportunidad, entrar en Europa, jugar la UEFA y poder disfrutarla y vivir ese ambiente y, sobre todo, aprendes. El año en Santander fue duro, pero se consiguieron los objetivos y de ese año aprendí muchísimo.
¿Desde Dnipropetrovsk sigue la Liga española o bastante tiene con la ucraniana?
Vemos mucho, posiblemente vea más aquí que allí. Aquí se ven todas las ligas europeas. Como los horarios nos vienen bien, solemos ver los tres partidos que se juegan los domingos. Estamos muy al día.
¿Que nos cuenta del Racing? ¿Qué le parece?
Me parece un equipo que ha salido de una situación difícil, pero no da sensaciones de pasar problemas. Está en la pelea por mantener la categoría pero no tiene signos de peligro. Se le ve un equipo sólido, fuerte, difícil de superar y de que le hagan goles y, además, rentabiliza muy bien los goles que marca.
El Racing de Marcelino se parece más al de Muñiz que el de Portugal...
Sí, sí. Creo que Marcelino ha sabido leer perfectamente la situación, conocía a muchos futbolistas y se ha adaptado muy bien a la realidad: el Racing tiene un objetivo y hay que cumplirlo.
Su club, como ahora el Racing de Alí, es de un magnate, ¿funciona el formato o está a merced de los caprichos del dueño?
Lo que hemos visto al llegar es que el equipo tiene ganas de mejorar, de hacer un buen proyecto, los fichajes se hacen con vista al futuro, con gente muy joven. El fútbol ucraniano físicamente es muy potente, fuerte, de contacto y creo que en clara progresión. Las instalaciones que hay aquí hay muy pocos equipos en España que las tengan. Tenemos una Ciudad Deportiva muy importante, con muchos medios y con ganas de que salga mucha gente de la propia cantera.
No es La Albericia ¿no?
No es La Albericia de cuando yo estaba. Ahora ya sé que la están mejorando. Aquí tenemos un campo cubierto con hierba sintética, con dimensiones reales, cuatro campos de hierba natural, dos hoteles dentro de la ciudad deportiva, uno para el fútbol base y otro para el profesional, gimnasio, piscina, medios para recuperarte... Ves un equipo que está invirtiendo para que en un futuro pueda equipararse al Dínamo y al Shakhtar.
¿Y la vida allí? O sólo se limitan al fútbol...
Gran parte de nuestro día está relacionado con el fútbol... La vida, simplemente, es diferente; otro clima, parecido a Soria, otra forma de vida, pero cuando te vas a otro país sabes a lo que vas y una de las cosas que tienes que hacer es adaptarte a las costumbres de aquí. No puedes venir a implantar el tipo de vida de España.