"Nunca aprendí tanto como en este Betis"

Mel en Vallecas. ¿Otro partido especial, como el de la primera vuelta?

Mucho más especial que aquel. Se trata de la primera vez que vuelvo allí y el público de Vallecas siempre me mostró mucho cariño, sobre todo cuando fui destituido. Fueron increíbles conmigo y allí pasé casi cuatro años maravillosos.

Han declarado el partido de alto riesgo, han quitado las vallas. Primero contra segundo. ¿Teme algo?

La afición del Rayo es muy respetuosa, nadie tuvo problemas en Vallecas. Van a apoyar a su equipo, van a silbar al Betis pero lo que hagan lo harán con todo el respeto del mundo. Un buen espectáculo en el que esperemos ganar.

Las cosas en el Rayo no van bien. ¿Le ha extrañado lo de la Conrcursal y las deudas?

Sí que me extraña. Mientras que yo estuve allí, el Rayo pagó religiosamente casi siempre, pero ahora ésa es su realidad y yo no escapo a ella. También estoy afectado, porque tampoco he cobrado y hace ya casi año y medio que me marché de allí.

Teresa Rivero, la presidenta, dice que usted "no se portó bien" con el club.

Todo lo contrario. Me porté bien con el Rayo no denunciando antes del cupo para que no le suspendieran los derechos federativos. Así lo hicimos tanto Rubén Castro como yo. Y después de tanto tiempo de que me echaran, no he cobrado, que es lo que hace cualquier trabajador de Dhul, de Clesa y de otra empresa.

Hablemos de fútbol. Al partido se le da dimensión de 'final'. ¿Pepe Mel lo cree?

No. Si quedaran cinco jornadas sí sería definitivo, pero después de éste faltarán once partidos, 33 puntos: demasiados como para calificarlo de final. La clave es que si sumamos tres, ellos no lo hacen. Es un buen paso, por eso se le da tanta importancia.

Los problemas económicos e institucionales hacen que se establezcan ciertas comparaciones entre Betis y Rayo Vallecano... ¿Lo ve así?

Nosotros tenemos una presión añadida que ha conocido ahora el Rayo: tres presidentes, diferentes consejeros, una medio intervención judicial... Pero con todo, hicimos la mejor primera vuelta de la historia. Al final, lo que importa es el fútbol.

¿Cuáles son las tres o cuatro claves futbolísticas para saber jugar en Vallecas?

Lo principal es saber dónde se pierde la pelota. Si lo haces en el mediocampo, en dos pases el equipo rival se planta en tu área. Después, que desde cualquier lado del campo el balón llega arriba. Además, no podemos dar facilidades en las contras para que nos pillen en inferioridad. Si eso ocurre, lo tendremos complicado.

Conoce bien al Rayo.

Tiene una de las mejores plantillas de Segunda. Armenteros, Trejo, Piti, Delibasic y Aganzo garantizan cosas en ataque. Javi Fuego, Michel y Movilla, en el centro; hay buenos porteros; Coke es un jugador especial que hace goles de lateral derecho y luego de central... Un equipo completo.

Así las cosas, un empate...

Firmar un empate antes de jugar es de mediocres. Si les digo eso a los jugadores pierdo credibilidad. Otra cosa es que el devenir del partido te haga pensar que un empate puede llegar a ser bueno.

Al menos, en Vallecas no se carga contra el Betis como en Vigo, lo que viene después. ¿Cómo se toma las críticas constantes del Celta?

Ya sucedió en la primera vuelta antes de que fuéramos a Vigo. Pero mantengo mi discurso de admiración profunda por el Rayo y el Celta, que están haciendo un campañón y eso nos hace más grandes a nosotros todavía. Venga el que venga con nosotros a Primera, porque nosotros iremos seguro, se lo habrá ganado con creces.

¿Por qué mantiene ese discurso de optimismo?

Porque soy el capitán de este barco y si no le digo a los pasajeros que vamos a llegar a buen puerto, aunque la travesía sea tan tortuosa, si yo no destilo optimismo, difícil que salga bien.

¿Piensa que, por ser el Betis, se le dará menos valor al ascenso?

Los béticos, que son los que importan, le darán un enorme valor al ascenso porque saben lo que padecemos desde junio. A todo eso hay que añadirle por ejemplo el problema de Miki Roqué, que nos ha hecho polvo. Un año tortuoso que esperemos acabe bien.

Dentro de ese año, la llegada de Gordillo. ¿Cómo valora sus cien días como presidente del Betis?

Ha logrado aunar al club, que todo el mundo reme para el mismo sitio. Y eso es importantísimo. Pero lo demás lo deben conseguir los futbolistas, que son los que deben llevarse los elogios.

Fundamental que dos ex futbolistas importantes, dos béticos, manejen al club: usted y Rafa.

Si no estuviera en el Betis y viera, como aficionado verdiblanco, que mi club tiene a un ex futbolista de presidente y un entrenador también, a dos béticos, estaría tranquilo. Porque no solamente miran como profesionales, sino que también miran por el bienestar de su equipo. Rafa y yo queremos lo mejor para el Betis.

Usted y Gordillo lograron otro ascenso, de jugadores. ¿En qué se parece aquel año a éste?

Entonces sufrimos más deportivamente, porque casi nunca fuimos primeros. Destituyeron al entrenador, lo cogió Cardeñosa, y hubo también transición entre presidentes. Pero al final se logró ascender. Espero que terminemos igual.

Vaya aventura ésta. ¿Un máster para Pepe Mel?

Sin duda, es la temporada en la que más estoy aprendiendo, no solamente en el aspecto normal de entrenador. Hasta la llegada de Stosic y Gordillo tuve que hacer muchas cosas y eso me ha enriquecido: primero, personalmente, porque he conocido de primera mano problemas de futbolistas. Y luego en el aspecto profesional, porque esa figura de manager inglés que todo lo lleva en lo deportivo también he comprobado cómo es. Hay que echarle mucho trabajo, muchas horas.

La gente le aprecia. ¿Cómo se toma los cánticos?

Me emociona que la gente me dé las gracias por hacer mi trabajo. Cada cántico es espectacular. Aunque también me da mucha responsabilidad. Soy el entrenador de mi equipo. Cuando no estaba en el Betis, cada triunfo del Betis lo hacía mío. Siendo profesional del fútbol, eso a veces te perjudica, porque a lo mejor dentro de muchos años me enfrento al Betis y tendré que venir a ganar a muerte. Pero no me arrepiento de reconocer mis colores.

Eso, prácticamente, le anula para entrenar al eterno rival, el Sevilla, algún día...

No escondo que mantengo una buena relación con Del Nido, que ha sido muy amable conmigo cuando nos hemos visto. Y conservo buenos amigos sevillistas, como Antonio Álvarez. Pero sé que declararme bético no suele ser compatible con entrenar al Sevilla. Lo acepto.

Habla de futuro. Firmó su renovación pero, ¿seguirá Mel seguro si sube al Betis?

Tenemos que estar en Primera y ni siquiera Gordillo puede decir si va a seguir de presidente. Con la sangre y sudor que hemos derrotado por ascender todos los estamentos, presidentes, consejeros, afición y hasta periodismo... no nos podemos ir a Segunda otra vez. Pero de momento prefiero centrarme sólo en el partido de Vallecas, repito. Cuando terminó el mes de enero había apuestas en Internet sobre el partido en que el Betis ascendía, y luego perdimos cinco seguidos. Pensar a largo plazo no trae nada bueno en medio de la temporada.

A Vallecas, pues. ¿Sabe ya si juega Aganzo?

Seguro. Os digo el once: Cobeño; Coke, Arribas, Amaya, Casado: Javi Fuego, Movilla; Piti, Armenteros, Trejo; y Aganzo.

¿Y el Betis?

Jaja.... El once del Betis no se dice ahora. Ni lo sé ni yo todavía.