Mel prepara con mimo la 'batalla de Vallecas'

Después de 34 años de tener casi enlatada a su afición, el Rayo escogió el próximo encuentro para quitarle las vallas a las gradas de su estadio. Será ante el Betis, en el encuentro más caliente del Teresa Rivero en bastante tiempo, primero contra segundo en la tabla. Mel, que entrenó durante años al club franjirrojo, conoce de sobra la idiosincrasia de la afición y también el fuerte ambiente que le espera a sus jugadores, multiplicado además por el hecho de que esta vez apenas habrá protección entre el público y los futbolistas, con menos de dos metros entre la grada y la línea de banda.

Insistirá el técnico a su plantilla en que no se asuste y vaya con la máxima personalidad, y también en la manera de jugar en un terreno de juego con dimensiones reducidísimas, 101 por 64 metros, lejos de los 105 por 70 que tiene el Villamarín.

Así las cosas, es probable que el técnico madrileño decida estrechar varios metros el campo A de la Ciudad Deportiva Luis del Sol, donde habitualmente se ejercita el Betis, para que sus hombres se habitúen durante toda la semana a la estrechez y la cortedad de un campo que, oficialmente, tiene muchos más metros de los que dispone en realidad. Algo parecido le pasó en Villarreal, donde le costó al Betis entrar en juego, pues es incluso más corto que el del Rayo: 99 por 65.

Habrá tope salarial en Primera

Vacas flacas, pocos dispendios y máxima contención salarial. Son las coordenadas del Consejo verdiblanco alimentadas por los administradores Concursales, que comienzan a plantear ya la política de fichajes para la próxima campaña, en Primera como se espera o en Segunda si no se sube. Aunque las cifras del tope salarial aún no se han concretado, la idea es que ningún futbolista supere el millón de euros de ficha neta, fijando el límite incluso un poco más bajo, en 900.000. Si los ingresos no son los esperados, el tope podría caer a los 600.000 euros, como ya ha ocurrido con muchos otros clubes de Concursal.