Biel y Sarmiento obran el milagro en Los Cármenes

El fútbol fue ayer muy cruel con el Granada. Injusto no, cruel. Porque de justicia es que quien marque un gol más que el rival se lleve los tres puntos. Otra cosa son los merecimientos y el fútbol desplegado. Ahí los andaluces fueron mucho mejores que el Salamanca, pero de poco consuelo sirve eso en Granada. Y poca alegría resta en Salamanca, donde el oportunismo de Brian Sarmiento vale tres puntos de oro. Oportunismo porque supo cazar de cabeza (pese a sus 163 centímetros) un balón que peinó Marcos Márquez, y porque de paso culminaba una contra charra con Siqueira tumbado en el suelo. De nada se pueden quejar los locales. En todo caso al colegiado.

Pero sí sería injusto achacar todos los méritos a Sarmiento. El partido que se marcó ayer Biel Ribas queda para el recuerdo, amargo en Los Cármenes y sabroso por tierras salmantinas. Y de paso define a la perfección cómo transucrrió el partido. Porque si alguien lo dudaba, el encuentro respondió fielmente al guión preestablecido: un Granada controlador del esférico y lanzando ataques despiadados a un Salamanca que no supo encerrarse bien atrás y tardó en darse cuenta que también podía hacer algo provechoso en ataque. De ahí que la victoria de los de Pepe Murcia tenga un valor incalculable.

Sin puntería.

Los de Fabri son un equipo con múltiples variantes para ganar los partidos. Tiene un hombre gol arriba, bandas como puñales, peligro a balón parado y un cerebro en el centro del campo que diseña casi siempre las jugadas adecuadas. Y todo ello lo puso en práctica ayer. Pero no era el día. Sobre todo de un Álex Geijo que la tuvo de todos los colores, pero le falló el punto de mira. El Granada atacó por todo lados, desaprovechando un dos contra uno de Collantes y Geijo, y topándose con Biel siempre, tanto si disparaba Abel, como si Ighalo cabeceaba o Benítez le pegaba duro. Siempre Biel. Pero es lo que tiene el fútbol, capaz de que un partido como el de ayer acabe 0-1. Y no terminó 0-2 porque Márquez dio un pase a Roberto en lugar de tirar bien un penalti. Las cosas del fútbol...

Fabri "Debemos ser más humildes y modestos"

La derrota nos devuelve a nuestra realidad. Tras este varapalo todos en Granada deberían valorar más lo que está haciendo este equipo desde el inicio de la temporada. Debemos aprender a ser mucho más modestos y humildes. En la jugada del gol del Salamanca ha habido una clara patada por detrás a Siqueira, que se ha quedado tendido en el suelo, pero entiendo que los jugadores del rival no la tiren fuera. El árbitro era el que debió parar el juego. Hemos jugado bien y creo que no hemos sido merecedores de perder el partido, pero no hemos tenido fortuna en ninguna de las jugadas de ataque".

Pepe Murcia "No opino sobre la jugada de nuestro gol"

Emocionalmente esta victoria es de una importancia grandiosa para nosotros. Creo que hemos hecho un buen encuentro en todas las líneas. A pesar de todo se ha podido dar cualquier resultado, pues el Granada llegó con peligro en varias ocasiones y nosotros fallamos un penalti ya con 0-1 a nuestro favor. Sobre la jugada del gol prefiero no opinar. No hago quinielas en cuanto a la permanencia en la categoría, porque todavía es muy pronto y quedan muchas jornadas por disputar. Tenemos que ir sumando puntos cuanto antes para llegar en mejores condiciones al tramo final de Liga".

Tángana tras el gol charro

El tanto de la victoria del Salamanca, obra de Sarmiento, llegó tras no tirar el balón fuera el conjunto charro. Los jugadores del Granada protestaron tras el gol y se formó una pequeña trifulca que no pasó a mayores pese al enfado de los andaluces.