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Aranzubía

"La alegría que sentí no la alcancé con ninguna parada"

C. Méndez
<b>PIONERO. </b>Cuando Aranzubía empató el partido contra el Almería, se convirtió en el primer portero de la historia de la Liga española que marcaba un gol de cabeza.

¿El sueño de todo portero es tener la oportunidad de marcar un gol en su carrera?

La verdad es que pensaba que me iba a retirar sin hacer ningún gol. Ni siquiera había pensado nunca en que lo podría conseguir. Ahora puedo decir que ya sé lo que es tener esa sensación de hacer un gol.

¿Y cómo fue esa sensación?

Fue increíble. La alegría que sentí no la alcancé con ninguna parada. Era una circunstancia completamente nueva para mí. Es impresionante ver que el balón entra en la portería. Es algo que nunca había hecho.

¿Qué le decían sus compañeros en la celebración?

Ni idea. Nos abrazamos, nos tiramos al suelo y todos gritaban, pero no escuchaba nada con claridad. Yo también gritaba... Luego todos me dieron la enhorabuena y me vacilaron un poco en el vestuario. Me llamaban pichichi y esas cosas.

¿Le costó calmarse?

Sí. Ahora estoy más tranquilo y ya lo he asimilado, pero hasta que pasó mucho tiempo en el vestuario, todavía tenía una sensación un poco extraña por todo lo que había pasado. Pienso que nunca había estado tan acelerado en toda mi vida.

¿Sabe que ha hecho historia en la Liga española?

Recordaba un gol de Palop en la UEFA y pensaba que algún portero ya habría metido algún gol de cabeza en la Liga, pero parece que no.

¿Recuerda haber hecho algún gol de pequeño?

Como portero nunca había marcado, pero muy de pequeño jugaba alguna vez de jugador de campo. Mi último gol fue con 13 años o algo así, en algún partido en el que pasaba lo típico, que faltaba gente y tenía que salir en otra posición, pero tampoco recuerdo exactamente en qué encuentro fue.

Una peña prometió justo desde el partido ante el Almería un chuletón de buey para cada jugador del Depor que marcase un gol fuera de casa y usted ha sido el primero...

Es algo que ya me contaron en el vestuario. Me lo ha comentado Ribera (el segundo entrenador del Deportivo), porque es la peña que lleva su nombre. La verdad es que no hubiera apostado a que iba a ser yo el primero.