Catarsis verdiblanca

Tres semanas seguidas ha pasado el Betis distraído por el dolor de las derrotas. El fin de la marcha triunfal trajo las dudas y se llevó los puestos de ascenso directo de Heliópolis. Vive el mundo verdiblanco una coyuntura de cambios e incertidumbre, lo que, sin darle tintes dramáticos, recibe el nombre de crisis. Crisis light porque queda un mundo y porque los rivales están a tiro de piedra. Pero crisis que necesita, también en su justa medida, una catarsis.

Catarsis significa purificación y purificar es lo que trata de hacer Mel con su cansado equipo aireándolo con nuevos nombres y un nuevo dibujo. Se recuperó Roqué, que debería apuntalar la defensa. Vuelve milagrosamente Emaná, aunque lo más probable es que el camerunés aguarde su turno en el banquillo y regresa el juego por las alas, el 4-4-2. Apuntan Juanma y Nacho a los extremos porque Momo y Miguel Lopes, llamados a ocupar esos puestos, tienen algunos días más de recuperación todavía. El Betis dejará un pivote en el banquillo (Beñat, presumiblemente) para intentar abrir el campo y meterle mano al Elche, tan rocoso (o más) que ese Recre que hace seis días se llevó el botín de Heliópolis.

Poco gol.

El Elche viste asimismo colores verdiblancos (no hoy, claro) y también cambiará Bordalás el sistema y buena parte del once. Ripa, Etxeita y Generelo sustituirán a los sancionados Albacar, Héctor Verdés y Acciari. El segundo equipo menos goleado (21 tantos en contra) es también uno de los menos anotadores, 19 dianas. Será en parte porque perdió a su pichichi de la temporada pasada, ese Jorge Molina que todavía no le ha pagado el Betis. Además, a los ilicitanos les ha faltado demasiado tiempo uno de futbolistas más talentosos, Kike Mateo, que saldrá de inicio esta vez.

No soplan buenos vientos tampoco para el equipo del Martínez Valero, que comenzó la temporada como uno de los máximos aspirantes a Primera y cuya última derrota, en casa ante el Cartagena, lo ha dejado más cerca de los de abajo que de los de arriba, seis puntos por encima de ese Albacete que cierra los puestos de descenso.

El Elche estará descabezado en su banquillo

El preparador de porteros del Elche, Marcos Abad, será el encargado de dirigir a pie de campo a su equipo como consecuencia de las sanciones del entrenador José Bordalás, su ayudante José Sarrió y su preparador físico Javier Vidal. El Betis podría situarles detrás del banquillo visitante como deferencia. Además, el presidente del Elche, José Sepulcre, se declaró hace unos días sorprendentemente "hincha del Betis". La razón, que un ascenso de los helipolitanos le permitiría cobrar el traspaso de Jorge Molina: "Con la Ley Concursal dependemos del concurso de acreedores para cobrar la deuda. Nos han dado la confianza de que va a ser un concurso rápido, aunque espero que el Betis suba y como un gran club salga del concurso de acreedores. Así que seré un hincha del Betis, por interés". Sepulcre, que se ha mantenido en contacto con Gordillo, presenciará el encuentro desde el palco del Benito Villamarín.