Inicio de la cuenta atrás

El sueño celeste de regresar a Primera esta cada vez más cerca. Esta tarde se pondrá en marcha la cuenta atrás para contabilizar los días que quedan para una fiesta que se ansía desde hace casi cuatro años. El primer escollo, a pesar de ser un filial, no será un mero trámite, tal y como se pudo comprobar en la primera jornada de Liga. Hasta la fecha, los blaugranas han sido los únicos capaces de vencer en Balaídos y, aunque los jugadores lo nieguen, en el vestuario hay ganas de revancha.

El Barça B está hecho a imagen y semejanza de su hermano mayor. Necesitan la posesión del esférico para sentirse vivos, entregan el balón al primer toque como si les quemara en los pies y ven el fútbol en alta definición. Su mayor enemigo puede ser, precisamente, un producto made in La Masía. Roberto Trashorras regresa a la que fue su casa durante ocho años con la misión de desquiciar el estilo blaugrana. El lucense sabe esconder el cuero mejor que nadie, aunque a Herrera tampoco le preocupa en demasía tener la posesión, porque los contragolpes olívicos pueden ser mortales de necesidad.

Dudas y debut.

El entrenador del conjunto gallego no quiso desvelar ayer el once que saltará al Mini Estadi. Quizá mantenga la incógnita, porque deba consultar con la almohada esa decisión. Michu se merece una oportunidad, pero Álex López nunca ha visitado el banquillo y López Garai parece intocable. Suceda lo que suceda, habrá sorpresa seguro.

El que sí se llevó una grata sorpresa fue Jota. El mediapunta del filial ha sido convocado por primera vez con el primer equipo. Cuenta con apenas 19 años y es una de las mayores promesas de la entidad viguesa. El canterano se confesó esta semana en AS. Dijo que su sueño era debutar con el primer equipo y que el escenario le era indiferente. Hoy puede cumplirse en el Mini Estadi. No es mal sitio.

Guardiola dijo adiós al Mini Estadi ante el Celta

Pep Guardiola protagonizó esta semana una campaña publicitaria, animando a los socios blaugranas a que asistan hoy al Mini Estadi para apoyar al filial frente al Celta. Precisamente, la última vez que los vigueses visitaron el campo anexo al Camp Nou, Guardiola fue protagonista. El 21 de septiembre de 1991, el ahora técnico culé, disputó su último encuentro en el Mini Estadi con el Barcelona B ante el Celta. Los catalanes se impusieron con contundencia (4-1) y Guardiola marcó de penalti. La siguiente jornada viajaría con el filial a Murcia y después Cruyff ya lo subiría al primer equipo.