Van Nistelrooy no se exige en la victoria del Hamburgo

El Hamburgo superó al Eintracht de Frankfurt (1-0) en partido de la 19ª novena jornada de la Bundesliga. El todavía equipo de Van Nistelrooy suma un triunfo importante para mantener sus aspiraciones europeas ante un rival con menos plantilla pero que empezaba la jornada a sólo un punto de un Hamburgo que salió muy fuerte, se desinfló cuando no encontró huecos en la defensa rival y apretó lo suficiente en la segunda parte para sumar el gol del triunfo. En los últimos minutos el Frankfurt buscó el empate a golpe de coraje pero el Hamburgo aguantó un triunfo sufrido pero justo en un partido sin demasiadas ocasiones pero con más dominio del equipo de Van Nistelrooy y Petric, que volvió tras su baja por lesión y marcó el gol del triunfo en el minuto 64. Con este triunfo el Hamburgo se sitúa sexto con los mismos puntos que el Bayern de Munich.

El gol llegó en una jugada de Ben-Hatira, que mejoró más escorado a la derecha en la segunda parte, cuyo centro se paseó por el área ante la mirada de la defensa y el portero del Frankfurt, muy pasivos. Van Nistelrooy no llegó al remate por el centro y Petric remachó en el segundo palo. Gol y tres puntos. Pero el tanto (y la vuelta de Petric) tiene una lectura que puede estar relacionada -para bien- con el intento del Real Madrid de recuperar a Ruud Van Nistelrooy, ya que el Hamburgo necesita la recuperación de los jugadores de ataque que ha tenido lesionados para acceder a negociar la salida del delantero holandés . Petric no sólo volvió sino que marcó el gol de la victoria.

Van Nistelrooy, referencia en ataque

Van Nistelrooy, por su parte, entró poco en contacto con el balón. Hizo de boya en ataque y esperó asistencias de Ben-Hatira, Ze Roberto y un Elia tan vertical como individualista. Como el Hamburgo, que comenzó muy presionante, bajó el ritmo y encontró pocos espacios, el delantero holandés participó poco en el juego. Trabajó en la presión y se movió con inteligencia en ataque, buscando el espacio en los pases largos y la posición de remate en el área en cada llegada de sus compañeros por banda. Trabajo de delantero experimentado e instintivo, algo que perdura aunque también es evidente que le falta un punto de chispa y velocidad. Pero a sus 34 años, Van Nistelrooy volvió a demostrar que tiene hambre e instinto a pesar de estar ya en la cuesta abajo física: el que tuvo, retuvo .

Su mejor y casi su única ocasión clara llegó poco antes del gol, en minutos de presión de su equipo. Recibió un pase en profundidad y disparó cruzado pero sin demasiada fuerza. Después, con el Frankfurt más abierto en busca del empate, condujo una contra en la que asistió a un Ze Roberto que quedaba en situación ideal para marcar pero que se entretuvo con el balón. En definitiva, Van Nistelrooy dejó detalles del jugador que siempre ha sido en un partido de no demasiado fútbol y en el que no estuvo muy asistido. Y, si es el último con la camiseta del Hamburgo, al menos le quedará el buen sabor del triunfo y del apoyo de su afición, que coreó su nombre. Siempre y cuando, claro, se concrete un acuerdo para el que puede que resulte instrumental el regreso con gol de Petric.